Barcelona Ciudad 30
Barcelona acepta el reto de transformarse en una ‘ciudad 30’, una metrópolis donde la velocidad máxima de circulación de los vehículos sea de 30 km/h. Se trata de una medida necesaria para mejorar la seguridad de los peatones y reducir la accidentalidad y la gravedad de las lesiones. Reducir la velocidad máxima de 50 a 30 km/h permite disminuir la tasa de mortalidad en atropellos de un 45 a un 5 %.
Barcelona ya tiene implantada desde hace años la reducción del límite máximo de velocidad a 30 km/h en las zonas 30 o en las calles con un único carril de circulación (o un carril por sentido en aquellos casos en los que estas vías tienen doble sentido de circulación). Eso supone que más de la mitad de las calles con circulación permitida en la ciudad ya tienen límite 30.
Fases de implantación
>80%
El riesgo de perder la vida a consecuencia de un atropello se reduce como mínimo cinco veces si la velocidad del vehículo que impacta es de 30 km/h en comparación con otro que circule a 50 km/h.
30 km/h en todas las vías de un solo carril
El Consejo de Ministros aprobó, el pasado 10 de noviembre de 2020, un real decreto que modifica el Reglamento general de circulación y el Reglamento general de vehículos, en materia de medidas urbanas de tráfico.
De acuerdo con esto, el real decreto modifica el artículo 50 del Reglamento general de circulación rebajando el límite de velocidad de circulación genérico en la vía urbana de 50 a 30 km/h en todas las vías que tienen un solo carril por sentido de circulación, con el fin de disminuir la siniestralidad entre los colectivos más vulnerables.
Este cambio estatal de norma se suma al decreto de Barcelona de principios del 2020, en que el Gobierno municipal estableció el máximo de 30 km/h en todas las calles de la red secundaria de la ciudad, incluyendo las que tuvieran más de un carril o más de un carril por sentido.
El Real decreto entra en vigor seis meses después de publicarse, el 11 de mayo de 2021.
Calles pacificadas: más seguridad y más salud
Las zonas con limitación de velocidad a 30 km/h permiten conseguir una ciudad más confortable, segura y tranquila. Pacificar el tráfico y aumentar la superficie segura para el conjunto de peatones reduce los accidentes y mejora la seguridad y la convivencia en los medios de desplazamiento.
La primera zona 30 se implantó en 2006 en el distrito de Sant Andreu a partir de una prueba a piloto de 16 km, y hoy las zonas 30 están repartidas por toda la ciudad; en total suman 650 km, cifra que representa un 47,7 % de la superficie destinada a la circulación de vehículos.
Reducción de la capacidad de circulación
A raíz de la crisis generada por la pandemia de la covid-19, en primavera de 2020 se ha hecho una ampliación táctica de las aceras para que los peatones puedan caminar con más seguridad. Para ello, se han reducido los carriles de tráfico para priorizar la movilidad a pie y pacificar la circulación de vehículos. Esta actuación se ha ejecutado en las calles Consell de Cent, de Girona y de Rocafort, que han pasado a tener un solo carril de circulación y aceras más amplias, y en la Vía Laietana, que ha aumentado la amplitud de sus aceras.
Aparte, en el cruce de la calle de Rocafort con Consell de Cent, donde confluyen dos de las vías en las cuales ya se han llevado a cabo intervenciones de ampliación de aceras, se ha realizado una acción táctica para hacer visible esta intersección y sumar nuevos espacios para la ciudadanía. En este ámbito, se incorpora espacio verde, mobiliario urbano y otros elementos de ocio para fomentar el juego. La nueva configuración del cruce también permite que los peatones puedan cruzar de manera más directa en este chaflán.
En la segunda fase, prevista para el otoño de 2020, se habilitarán 2850 metros cuadrados nuevos para peatones con dos actuaciones de ampliación de aceras con intervenciones tácticas: la ronda de la Universidad, con la ampliación táctica de las dos aceras, y la calle de Pelai (entre ronda de la Universidad y plaza de Catalunya), con una ampliación táctica de la acera mar.