Todo lo que solo encontrarás en las Fiestas de Sant Roc
Las Fiestas de Sant Roc de la Plaza Nova, que cada año se hacen alrededor del día 16 de agosto, son las más antiguas que se celebran en Barcelona. Empezaron a organizarse en 1589, hace ahora 432 años (aunque, a causa de guerras y epidemias, no se han podido hacer todos los años). De hecho, uno de los elementos más singulares es su ubicación: la plaza Nova, que, como decía Alfons Cánovas, en 1972: “Plaza Nova, que ni es nueva y que de plaza tiene poco, los vecinos que la aman ya no están en este lugar, solamente quedan las murallas y la imagen de san Roque”. Además, las fiestas están cargadas de elementos que no se pueden encontrar en ningún otro sitio y que son centenarios, como la cucaña, los gigantes viejos, el globo del Capità Munyon, el porrón largo y los panellets.
Te presentamos los elementos más singulares de esta fiesta mayor:
Cu-cut a lomos de un burro. Como muchas otras fiestas mayores, las Fiestas de Sant Roc de la Plaza Nova empiezan con un pasacalle que, en este caso, es muy especial: ¡lo encabeza el cabezudo Cu-cut montado en un burro! Los otros cabezudos del grupo, el enano Cu-cut y los Grallers La Pessigolla completan al séquito.
Panellets de Sant Roc. Los panellets de Sant Roc son los dulces típicos de las fiestas de la plaza Nova. Se hacen para honrar al santo y solo se ven por estas fechas. No tienen nada que ver con los panellets de Todos los Santos, sino que son una mezcla de los polvorones de Navidad y las pastas de té. La tradición de la ofrenda de panellets tiene el origen en la leyenda de san Roque, de quien se cuenta que cuando llegó a Barcelona cayó enfermo de peste y solo lo cuidó el perro de la panadería del barrio, que lo alimentaba con panecillos. Si los quieres probar, los encontrarás todos los días de la fiesta.
La cucaña centenaria. La cucaña es un juego popular que consiste en trepar a un palo engrasado o enjabonado (o bien, andar por encima de él) sin caerse, con el objetivo de recoger el premio que hay en el otro extremo. La mayoría de las cucañas son verticales y no se conservan de fiesta a fiesta, pero no es el caso de la cucaña de la plaza Nova, que data de 1884 y tiene una singularidad: es el ejemplar de cucaña horizontal más antiguo que se conserva en Cataluña. Si quieres intentar subir, estará cada día durante la Fiesta Mayor.
Bailes en la Catedral y en el Obispado. Cuando acaba la ceremonia, todo el séquito se dirige a la Catedral, donde, desde hace un par de años, el Àliga baila delante de la capilla de Sant Roc. Acto seguido, se hace una visita al Palacio Episcopal, donde baila todo el Séquito: el Diable de Sant Roc, el Àliga, el Lleó, el baile de bastons del Esbart Català de Dansaires, el enano Cu-cut, los gigantes infantiles y los gigantes viejos o de Sant Roc.
La bandera verde. Después de los bailes en el patio del Obispado, las figuras se dirigen a la plaza Nova, donde presencian la izada de la bandera verde de la comisión de fiestas en la balconada principal del Obispado, un privilegio de las Fiestas de Sant Roc. La bandera actual es de 1903, pero el acto de la izada se lleva a cabo desde 1789.
El porrón largo. ¿Te atreves a beber de un porrón que tiene un pitorro de cincuenta y cinco centímetros? Como cada año desde 1830, el porrón largo, lleno de buen vino, permanecerá todo el día en la plaza Nova para que beban todos los que puedan levantar su larguísimo pitorro.
El globo del Capità Munyon. Los festivales infantiles son uno de los actos más frecuentes en cualquier fiesta mayor, pero el que se hace en la plaza Nova tiene un elemento especial: el globo del Capità Munyon. Se trata del despegue de un pequeño globo aerostático casero que cada año toma la forma de algún personaje elegido por su imagen negativa. Además, habrá títeres, magia y juegos tradicionales, como carreras de sacos y del huevo y la cuchara, romper la olla y la popular cucaña.
La fiesta del perro. La leyenda siempre pinta a san Roque acompañado de su perro inseparable. Por eso, estos animales también tienen su papel en la fiesta. Habrá pruebas de exhibición canina y se hará el tradicional saludo del perro a san Roque. Se trata de un acto en el que todos los perros del barrio pasan por delante de la imagen del santo para pedirle protección.