Los cabezudos de los pitufos son unas figuras vinculadas a las Colonias Pare Turull. Representan a un pitufo y una pitufa, de color azul y con barretina roja, y tienen una fisonomía dulce e infantil que parece sacada de un cuento para niños.

Los cabezudos se construyeron inicialmente para animar las actividades que los Padres Escolapios hacían en la casa de colonias del valle de Pineta, y también para introducir a los niños en el mundo de la imaginería festiva, de manera que pudieran llevar unas figuras de poco peso.

La construcción de los pitufos se encargó al imaginero Domènec Umbert y se convirtieron en la primera obra después de la vuelta del artista como maestro geganter. Los terminó en 1980 y se estrenaron ese mismo verano en las colonias.

El pitufo y la pitufa salen cada año por las fiestas del Clot, del Camp de l’Arpa y de más barrios barceloneses, y suelen acompañar tanto a los gigantes y gegantons de las Colonias Jordi Turull como a los de Sant Josep de Calassanç. Actualmente, los miembros más jóvenes de la Colla de Geganters i Grallers del Barri de Sant Antoni son los encargados de hacerlos pasear y bailar en los pasacalles y encuentros a los que son invitados.