El panoli y la coca de cerezas son dos dulces barceloneses que se venden en torno a la festividad del Corpus. Así pues, es muy habitual encontrarlos en las pastelerías de la ciudad entre los meses de mayo y junio.

El panoli es un dulce anisado de harina, huevo y azúcar; y la coca de cerezas se hace con harina y azúcar y se hornea con cerezas naturales encima. Las dos son manjares típicos también de más lugares del país en torno a esta festividad, y se pueden encontrar muchas variantes.