La giganta Núria Feliu es una figura muy femenina y puesta, preparada para ir a bailar o a pasear, que representa a la conocida cantante del barrio de Sants. Lleva una falda larga morada, una americana ceñida del mismo color, un collar y unos pendientes vistosos que adornan un pelo corto y rubio, peinados de la misma manera que la artista. En las manos tiene un ramo de violetas, que son las flores que más le gustan, y la partitura de la Cançó de Sants, la más popular de su repertorio.

La iniciativa de crear esta figura fue de la propia Núria Feliu, a quien siempre le han entusiasmado los gigantes, con motivo de una celebración doble: sus setenta años y los cincuenta de profesión. Por eso se puso en contacto con el maestro imaginero Toni Mujal, quien se encargó de construir a la giganta a partir de los dibujos que había elaborado Cecília Vidal.

En setiembre del 2011, la gran Núria Feliu se presentó en una ceremonia oficiada por el cabezudo Mossèn Filomeno, rector de la parroquia de Sant Cristòfol Nen, y tuvo por padrinos a Bartomeu y Maria, de los Gigantes Viejos de Sants.

Un año más tarde, la artista cedió la giganta al distrito de Sants-Monjuïc para que se exhibiera de manera permanente en el centro cívico del barrio, donde se puede visitar desde entonces. Con todo, siempre que sale en actos y celebraciones, tanto en la ciudad como fuera, es la Colla dels Geganters de Sants la encargada de portarla y hacerla bailar.