Bocs de Can Rosés
En el año 1996, durante la Fiesta Mayor de Les Corts, nació la colla de diables Bocs de Can Rosés, con la finalidad de contribuir a difundir la cultura tradicional del fuego. La agrupación se refundó en el 2006, después de pasar unos cuantos años inactiva.
La bestia de fuego de los diables de Can Rosés es el Guardià de Les Corts, el dragón compartido con el grupo de percusión de la Repúbli-k de l'Avern, los Diables i Timbalers d'Ítaca y los Diables de Les Corts. Es una réplica del dragón de Antoni Gaudí situado en la entrada de los Pabellones Güell de la avenida de Pedralbes, una gran escultura que simboliza el dragón mitológico descrito por el poeta Jacint Verdaguer. Es el primer dragón construido íntegramente de metal forjado, excepto la cabeza, que está hecha de fibra sintética y que dispone de dos engranajes que le dan movilidad.
Desde el 2008, el grupo cuenta con una colla de tamborileros propia que lo acompaña en las actuaciones y hace sonar melodías de percusión tradicional. Habitualmente, actúan en las fiestas mayores del barrio y de más distritos de la ciudad, y también fuera de Barcelona.