La nueva museografía, pronto en la planta 4
26JUL2016
La planta 4 de la sede de Montjuïc, la dedicada a exposiciones temporales, está cerrada para realizar reformas que sustituirán a las antiguas vitrinas para una museografía más contemporánea.
Cuando se reabrió el museo el pasado mes de octubre, se pudo contemplar la renovación que se hizo de la segunda planta, con una nueva exposición estable y unos elementos expositivos completamente diferentes de los que se disponía en el año 2011, cuando cerró sus puertas. En la cuarta planta, en cambio, se habían restaurado las antiguas vitrinas. Ahora se inicia un periodo para terminar de incorporar esta nueva museografía a todas las salas de exposición.
Las vitrinas que hasta ahora acogían las exposiciones Terra de canterers y El sagrat, el profà i la festa, eran las originarias del año 1973, cuando se inauguró el edificio actual. En su momento se trataba de unas vitrinas muy modernas, en consonancia con la arquitectura funcionalista y diseñadas expresamente para la estructura hexagonal de las plantas.
La colmena que se dibuja tanto en tierra como en el techo, delimitado por columnas en las aristas de cada polígono, podía cerrarse con vitrinas que eran accesibles desde ambos lados. Su profundidad permitía que se dispusieran objetos diferentes a ambos lados o ubicar otros de gran dimensión, visibles por delante y por detrás.
Los ventanales, orientados en el lado norte, y los patios interiores, junto con la forma de encajar el mobiliario en las columnas, de tal manera que no tocaba el suelo, proporcionaban al espacio un carácter diáfano y luminoso. A pesar de ello, a lo largo de los 40 años en los que se han utilizado estas vitrinas, no siempre se han potenciado estas posibilidades, y a veces se ha optado por cerrar los espacios al máximo, ampliando las superficies donde se podían colocar objetos o paneles informativos y creando ambientes aislados con iluminación artificial.
¡Bien diseñadas debían estar estas vitrinas para poder dar servicio durante tantas décadas! Hace apenas un año, cuando se instalaban las últimas temporales, los profesionales que disponían los objetos destacaban que era muy cómodo trabajar, por su tamaño y accesibilidad. Pero los nuevos tiempos traen nuevos estilos museográficos, y actualmente se apuesta por aumentar la accesibilidad de los visitantes y potenciar la mirada táctil: permitir que los visitantes se acerquen lo máximo posible a los objetos, desde diferentes perspectivas y sin cristales de por medio, siempre que sea posible respetando la conservación de los materiales.
Así pues, la disposición en plataformas, jugando con diferentes secciones de los hexágonos, siempre presentes, permite disponer objetos de diferentes tamaños, componente ámbitos temáticos donde las piezas dialogan entre sí y crean un significado y un discurso conjuntos. Además, la eliminación de las barreras visuales que suponían las vitrinas permite aumentar la luminosidad natural, uno de los fuertes de la arquitectura del edificio, y crear más espacios amplios y diáfanos donde poder realizar actividades.
Esperamos poder presentaros, antes de finales de año, una cuarta planta completamente renovada con una nueva exposición temporal donde se pueda disfrutar, aprender y reflexionar a partir de la etnología más contemporánea.