30AGO2017
Eid al Adha: la Fiesta del cordero
El pasado 1 de septiembre, la comunidad musulmana celebró una de las fiestas más destacadas de su calendario religioso: el Eid al Adha o Fiesta del sacrificio, también conocida como la Fiesta del cordero. Es una jornada familiar que conmemora el sacrificio de Abraham.
Y es que Abraham es un personaje destacado en las tres religiones del libro: cristianismo, judaísmo e Islam. Por eso los musulmanes conmemoran el momento en que Dios ordenó a Abraham sacrificar a su primogénito para poner a prueba su fidelidad antes de detener su mano en el último momento y ordenarle que, en lugar de sacrificar al muchacho, le ofreciera un cordero.
El hecho que se hable del primogénito ha dado origen a lecturas divergentes en las tradiciones cristiana y musulmana. Y es que Abraham, según la tradición, tuvo un primer hijo, Ismael, con su esclava, Agar, y un segundo hijo, Isaac, con su esposa, Sara. Mientras que los cristianos creen que Dios ordenó Abraham sacrificar a Isaac, los musulmanes defienden que el objeto del sacrificio era el primogénito real, Ismael. Sea como sea, se cree que Mahoma reprodujo el sacrificio del cordero durante su estancia en la Meca, un hecho que ha convertido este ritual en una fiesta imprescindible del calendario islámico que hermana a musulmanes del mundo entero. El del cordero es el sacrificio preferido y el más habitual, aunque es posible utilizar otros animales como terneras, cabras o, según el lugar, incluso camellos.
El Eid al Adha o Fiesta del sacrificio coincide con el momento culminante del peregrinaje a la Meca (el Hajj, un periodo que, según el año, dura entre seis y diez días). La fiesta empieza temprano por la mañana, con la plegaria familiar o comunitaria. Después, es costumbre que se sacrifique el cordero en familia y siguiendo siempre las prácticas halal, que especifican entre otras cosas que el animal debe morir desangrado.
En Occidente, el ritual ha generado críticas de grupos animalistas que consideran que el método de sacrificio es cruel para los animales. De todas maneras, la legislación en ciudades como Barcelona impide que el ritual se realice fuera de los espacios designados al efecto, de forma que las familias van a buscar a las carnicerías o los mataderos los corderos que han encargado. El cordero que se compre tiene que dividirse en tres partes: una destinada a la familia, otra a los amigos y una tercera parte a los pobres.
Marroquíes, gambianos, senegaleses y pakistaneses son algunas de las comunidades que celebran esta fiesta, que tiene un carácter marcadamente familiar y grupal. Se vive en comunidad y es un día alegre durante el cual la reconciliación es un elemento destacado. El Eid al Adha es el momento de perdonar y dejar atrás las desavenencias.
Gente en la calle, niños y niñas con vestidos nuevos... Lo veréis en barrios con población musulmana durante la jornada, aunque las celebraciones pueden durar varios días mientras se espera el regreso de los parientes y amigos que hayan ido en peregrinación a la Meca.
La comida es un elemento imprescindible del Eid al Adha, una fiesta durante la cual se come mucho, especialmente platos abundantes y ricos destinados básicamente a honrar a las visitas y, si no se lo pueden permitir, facilitarles el acceso a los manjares más exquisitos.