La amplia colección de pipas -con más de 300 ejemplares- es la más destacada de esta sala. Sus procedencias son muy diversas. Mayoritariamente europeas, las hay también turcas e indias. Muchas conservan sus estuches originales -de sinuosa silueta- de cuero y terciopelo, en los que se pueden apreciar los nombres de los establecimientos y ciudades donde fueron adquiridas. La mayor parte son para consumo de tabaco pero hay alguna destinada al opio. Su particular modo de exhibición resalta el aspecto decorativo de la colección.

Una atenta observación permite apreciar los variados materiales y técnicas empleados. Entre los materiales distinguimos, entro otros: terracota, hueso, espuma de mar, ámbar, y metal.

En algunos casos las técnicas artesanales utilizadas las convierten en pequeñas esculturas. Los temas representados son variados. Destacan los retratos de personajes célebres -como el de Beethoven, situado en una de las vitrinas planas-; escenas mitológicas; personajes zoomórficos -es decir con forma animal-, y escenas costumbristas. Puede intentar localizar algunos ejemplares con representaciones realmente curiosas, como una mano que sostiene un cráneo, una dama con lentes y sombrilla, o un velocípedo.