Historiando es un proyecto situado en el barrio de Can Clos, en la Marina, que forma parte de una serie de acontecimientos teatrales performativos sobre la memoria, desarrollados en Barcelona por el colectivo La Inefable mediante procesos comunitarios y de creación participativa, y agrupados bajo el título Habitar la memoria.
En palabras del propio colectivo: «Cuando hablamos de memoria histórica, imaginamos gestos fuera de nosotros: abrir un libro, leer una placa, escuchar a alguien que nos enseña… Habitar la memoria imagina un movimiento desde dentro: el libro está en nuestro interior y somos nosotros los que explicamos la historia que contiene».
Los procesos de creación de La Inefable, hasta llegar a la definición de un espectáculo, piden siempre a las personas que trabajan, que recuperen la historia de su vecindario y que la expliquen a través de experiencias sensoriales en las cuales no solo sea la palabra el instrumento para narrarla, sino también los olores, los sonidos, el tacto...
De nuevo, en palabras de La Inefable: «La historia pasa por el cuerpo despertando la memoria de quien vive la experiencia teatral final. Esta forma de empatía hace que los recuerdos de otro también se vuelvan propios. Se crea un eco que hace que la historia de un vecindario vaya más allá de sus fronteras y se convierta en universal».
A partir de este concepto La Inefable empezó desde tiempo una investigación sobre la memoria popular y emotiva de la Marina. Durante el año pasado, y a pesar de las dificultades derivadas de la emergencia sanitaria, se ha dado continuidad a este proceso de investigación sobre sobre cómo crear colectivamente una “experiencia del recuerdo”.
Junto con un grupo de mujeres, las Yaies del Can Clos, de la Asociación de Vecinas y Vecinos de Can Clos, se ha desarrollado un archivo emocional: un lugar donde los recuerdos se pueden tocar, oler, escuchar... A través de la lente distorsionadora del tiempo surgen recuerdos emotivos que al compartirlos forman la identidad de un territorio.
Uno de los objetivos de La Inefable con este proyecto ha sido dar voz a una memoria oral poética y cotidiana, con la convicción que si alguien tiene derecho a explicar una historia es, precisamente, quién la vivió.
A partir de todo el material reunido a lo largo de 6 encuentros entre marzo y el abril de este año se está creando una instalación donde los recuerdos tomarán también forma de olores, sonidos y objetos. Este archivo vivo y emocional se abrirá próximamente en el barrio.