Boletín MUHBA número 26
De la muralla de Barcino al empuje industrial
En tiempos difíciles como los que ahora vivimos, la investigación histórica nos puede ayudar a valorar los grandes desastres del pasado, pero también puede ser útil para conocer cómo fue posible salir adelante. Si las murallas del siglo IV, incorporadas hoy al paisaje del casco histórico, fueron decisivas para la continuidad urbana entre Barcino y la capital medieval, la exposición "Indianas 1736 a 1847. Los orígenes de la Barcelona industrial ", que se acaba de inaugurar, muestra como la creatividad, el trabajo y la receptividad a la innovación fueron cruciales para mitigar el traumático inicio del siglo XVIII, con la derrota de 1714, y para poner las bases de la moderna ciudad industrial: "nuestro ingenio, nuestro corazón, nuestra lanzadera", decía el diario El Vapor del año 1834. Una ciudad que finalmente pudo derribar las murallas que entonces la limitaban y avanzar hacia la Barcelona del Eixample y las exposiciones, capital renacida de Cataluña ante Europa.