Casi un centenar de personas se reunieron en el salón de actos del Museu Picasso, el 26 de octubre, para celebrar un acto con motivo del Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo, bajo el lema “En Barcelona, cuidamos a quien cuida”.
Personas cuidadoras familiares, trabajadoras del hogar y los cuidados y profesionales de entidades del ámbito se reunieron en un evento significativo, emotivo y reivindicativo para poner en valor el papel fundamental de los cuidados. El objetivo fue encontrarnos para seguir dando visibilidad y fuerza a los cuidados como pilar esencial del bienestar colectivo, recordando que quien cuida también necesita ser cuidado y que hay que defender sus derechos.
Os invitamos a consultar el álbum fotográfico para revivir los momentos más destacados y repasar los contenidos clave de esta jornada tan especial.
La presentación de la concejala
En su discurso inaugural, la Concejala de Salud, Personas con Discapacidad y Estrategia contra la Soledad, Dª. Marta Villanueva Cendán, quiso “rendir homenaje a los miles de personas cuidadoras de nuestra ciudad, mayoritariamente mujeres, muchas veces migrantes y racializadas, que cuidan a personas enfermas, con autonomía funcional reducida o en situación de dependencia y discapacidad”.
Villanueva añadió que “desde el Ayuntamiento continuaremos trabajando para transformar las relaciones sociales y económicas que definen la organización del cuidado, incorporando la perspectiva de género, los principios de la no discriminación y el enfoque basado en derechos humanos”.
Podéis leer la nota de prensa entera.
La conferencia experta
Silvia Bofill Poch, antropóloga, profesional de la Universidad de Barcelona y miembro de la Red por el Derecho al Cuidado, nos motivó a la reflexión con sus inspiradoras palabras.
Aquí tenéis un resumen de su intervención:
El cuidado es un derecho humano fundamental que debería ser reconocido en la Constitución. Todas las personas necesitamos cuidados en algún momento de la vida, y también podemos ser cuidadoras de otras. Este derecho implica recibir y cuidar de forma justa y digna, sin que ello empobrezca o afecte negativamente a las personas que cuidan.
Aunque es esencial para la vida, el cuidado no tiene valor. Son sobre todo las mujeres las que cuidan, a menudo sin sueldo o con bajos salarios y pocas garantías laborales, ya sea en el ámbito familiar o profesional. Durante la pandemia, muchas cuidadoras se arriesgaron por atender a personas vulnerables, pero su trabajo no recibió el mismo reconocimiento que otros sectores esenciales. Además, la falta de apoyo público hace que las cuidadoras familiares carguen a menudo solas con una gran carga y responsabilidad.
Las políticas de cuidado, fragmentadas e insuficientes, no resuelven las necesidades actuales y las normativas dispersas dificultan una respuesta integral. Por eso, la Red por el Derecho al Cuidado, formada por académicas, profesionales y activistas, impulsa el reconocimiento del cuidado como derecho fundamental y defiende un Sistema Nacional de Cuidado, público y universal, como la sanidad o la educación. Es urgente y necesario un cambio de modelo para garantizar que el cuidado sea una responsabilidad compartida, con servicios accesibles para las personas cuidadas y condiciones dignas para las personas que cuidan.
Los cuidados en la escena
La Xixa utilizó la metodología del Teatre Fòrum para abordar uno de los conflictos más habituales entre familias cuidadoras: la situación de unas hijas y un hijo que se ven con el dilema de cómo ayudar a la madre, que ya no puede seguir cuidando al padre. La puesta en escena incluyó una entrevista a una cuidadora profesional, añadiendo una visión más directa de la realidad de las personas cuidadoras y trabajadoras del hogar y los cuidados.
Con la propuesta interactiva y participativa de las actrices y los actores de La Xixa, el público se implicó activamente, creándose un espacio de confianza y libertad en el que todas las voces tuvieron la posibilidad de surgir, ser escuchadas y visibilizadas. Durante la sesión, unas 15 personas del público cogieron el micrófono para compartir sus reflexiones y experiencias, y más se le habrían sumado si hubiera tiempo. En este entorno seguro, dos personas se subieron a escena para proponer soluciones y modificar el curso de la escena, generando un momento de reflexión colectiva y empoderamiento sobre el papel de los cuidados dentro de las familias y la comunidad.
Un recurso para personas cuidadoras
Assumpta Soler Farràs, responsable del Programa de Cuidados de la Dirección de Servicios de Salud y Cuidados del Ayuntamiento de Barcelona, presentó dos vídeos del teléfono de apoyo emocional y psicológico, un recurso de la Tarjeta Cuidadora para las personas cuidadoras familiares y trabajadoras del hogar y los cuidados.
Podéis consultar el vídeo del Teléfono de apoyo emocional de la Tarjeta Cuidadora (trabajadores/as del hogar y los cuidados) y el vídeo Teléfono de apoyo emocional de la Tarjeta Cuidadora (familiares cuidadores/as).
La voz de jóvenes cuidadores
Georgina Avilés Sarrias, Sergio López Gómez y Dani Ramírez Morales, cerraron la jornada con sus emotivos y valientes testigos como jóvenes cuidadores.
Transmitieron el poder transformador de los cuidados y la importancia de dar voz a las personas que cuidan en silencio. También reivindicaron el apoyo necesario para las cuidadoras jóvenes, que a menudo deben asumir esta tarea de forma prematura, compaginándola con los estudios y la vida personal, lo que conlleva muchas dificultades. Os invitamos a leer su manifiesto.