Barcelona + Sostenible

Hablamos con diversos alumnos y docentes de centros educativos, desde educación infantil hasta bachillerato y ciclos formativos, para conocer su opinión y experiencia durante los Actos de final de curso. Podréis descubrir iniciativas sostenibles originales impulsadas con la participación de los estudiantes, así como sus objetivos para el curso próximo.

Acto de final de curso de educación especial, infantil y primaria

Escuela Infantil Magnolia Barcelona

Tània, profesora.

¿Qué es lo que más os ha gustado del acontecimiento?

Tània: Personalmente, me ha gustado mucho la ubicación donde se ha llevado a cabo las actividades de arte mural y la de la maleta de la arena que han realizado el alumnado, ya que han sido muy divertidas y originales. Ésta última les ha gustado especialmente porque tenían muchas ganas de ir a la playa y poder interactuar con el entorno.

¿Pensamientos que estas vivencias relacionadas con la sostenibilidad ayudan a los niños a entender la importancia de cuidar el entorno?

Tània: Totalmente. Los niños y niñas más pequeños necesitan tocar y experimentar para entender las cosas, y todas las actividades que implican manipular elementos hacen que interioricen mejor los conocimientos y puedan llegar a concienciarse.

¿Qué ideas tenéis previstas en materia de sostenibilidad para tratar en el aula el curso próximo?

Tània: Este año hemos trabajado mucho el tema de la importancia del agua y la sequía en la escuela. El curso próximo queremos seguir haciendo actividades relacionadas con el ahorro de agua, la contaminación por plásticos y el Día Mundial del Agua, con un enfoque artístico e implicando a las familias. También seguiremos participando en el proyecto “Aliméntate con juicio” con el fin de promover un consumo alimenticio sostenible y consciente en el centro y reducir el despilfarro.

Escuela Maristas Anna Ravell

Montse, profesora.

¿Qué aprendizajes cruces que el alumnado ha sacado de la experiencia?

Montse: El alumnado ha aprendido la importancia de cuidar el entorno desde una nueva perspectiva, a través de la interacción con otros compañeros y compañeras. Salir de la escuela y pasar el día con niños y niñas de diferentes edades y centros educativos siempre los motiva mucho. Sin duda, las actividades que más han disfrutado han sido el juego de la red trófica, porque podían correr y jugar a la vez que han aprendido sobre la biodiversidad marina; y la del arte mural, porque han pintado y desarreglado ir su imaginación, cosa que siempre los encanta.

Personalmente, he encontrado muy interesante la actividad del cuentacuentos por la oportunidad que significa poder conocer de primera mano Open Arms, la ONG que ha sido a cargo de esta dinámica.

¿Qué acciones habéis implementado para promover la sostenibilidad en vuestro centro educativo? ¿Cuáles queréis implementar el curso próximo?

Montse: Este año, con el alumnado de cuarto de primaria, hemos participado en la iniciativa “SSSplau”, que trabaja el tema de la contaminación acústica en las escuelas. Hemos analizado el nivel de ruido en el centro educativo mediante los sonómetros prestados por el Servicio de Documentación de Educación Ambiental (SDEA) y hemos recibido formación para extraer los datos. Después, hemos pensado maneras de reducir el ruido a los pasillos y a las aulas, haciendo una campaña de sensibilización con la ayuda del alumnado y el equipo docente. El curso próximo nos gustaría ir un paso más allá y estudiar el ruido del barrio con el alumnado de quinto.

¿Cómo ha participado el alumnado en este proyecto? ¿Cuáles han sido sus roles y responsabilidades?

Montse: El alumnado se ha organizado en grupos y ha sido a quien ha utilizado y seleccionado los espacios a medir con la ayuda de los sonómetros, recogiendo posteriormente los datos que han plasmado en gráficas. En este sentido, también han participado en la Semana Sin Ruido organizando un concurso y diversas actividades. Gracias a la implicación de todas las personas del centro educativo, la jornada ha sido todo un éxito.

Escuela de Educación Especial ASPACE

Montse, Àngels y Carme; trabajadora y profesoras del centro.

¿Cómo ha sido la participación de vuestro alumnado en las actividades de la jornada? ¿Cuál es tu opinión sobre la facilidad de adaptación y accesibilidad de las actividades para las necesidades específicas de vuestro alumnado?

Montse: La participación ha sido muy positiva. Los niños y niñas han disfrutado mucho y han podido participar en todas las actividades, ya que estaban muy bien adaptadas a sus necesidades, con muchas actividades sensoriales y tiempo suficiente para todo el mundo. El espacio ha estado muy agradable, al lado de la playa y con zonas de sombra, aunque en algunos puntos del parque el terreno presentaba algún pequeño tramo que podía suponer cierta dificultad a la movilidad con las sillas de ruedas.

¿Podéis explicar brevemente qué acciones habéis llevado a cabo en vuestro centro educativo en materia de sostenibilidad? ¿Cuáles tenéis entre manos para el curso próximo?

Àngels: Este curso hemos trabajado especialmente en el proyecto del huerto de la escuela, utilizando recipientes reciclados para la mesa de cultivo. También tenemos dos compostadoras en funcionamiento que nos ofrecieron desde la Red de Escuelas + Sostenibles. Además, hemos implicado mucho al alumnado en la separación de residuos, formando a una Brigada Verde con los estudiantes que han asistido al Acto de final de curso. Este grupo se encarga de recoger las bolsas de las papeleras de reciclaje y llevarlas a los contenedores de la calle.

Carme: Así pues, también hemos trabajado para reducir el uso de los plásticos de un solo uso en los envoltorios de los desayunos, que ahora son sostenibles y reutilizables, y en diversos utensilios del comedor de la escuela. Una nueva iniciativa que hemos empezado a preparar para el curso próximo es la instalación de depósitos de aguas pluviales y de canalones para poder reutilizar el agua y contribuir a reducir nuestro consumo al centro en respuesta a la situación de sequía.

Acto de final de curso de secundaria, bachillerato y ciclos formativos

Instituto Sagrera Sant Andreu

Queralt y Rashid, alumnos. Laura, profesora.

¿Podéis explicarnos en qué consistió el proyecto presentado al pasado el Acto de final de curso?

Queralt: Nuestro proyecto abordó el tema del coltan, un mineral utilizado para extraer tantalita, que es sobradamente utilizado en la fabricación de teléfonos móviles. Nos impactó descubrir que en las minas de extracción de este mineral en la República del Congo, las condiciones de los trabajadores son deplorables, y muchas de ellas utilizan la mano de obra infantil.

Rashid: Por este motivo, después de reflexionar en el aula, concluimos que la mejor manera de contribuir era a través de concienciar a la ciudadanía. Así pues, plasmamos la información descubierta en trípticos y salimos a las calles del barrio de Sant Andreu para repartirlos y explicar a la gente la situación que hay detrás de los teléfonos móviles.

¿De cara al curso próximo, tenéis algún proyecto nuevo entre manos que comporte extender la cultura de la sostenibilidad al centro?

Laura: Para el próximo curso, estamos considerando la creación de las figuras de los Ecodelegados, una iniciativa que ya está en funcionamiento en otras escuelas. Aprovechando el Acto de final de curso, estamos manteniendo conversas con docentes de otros centros por conocer sus estrategias y consejos. Espero hacerlo realidad el curso próximo.

¿Podéis explicar en qué consiste el programa Help? ¿Y lo Urban Garden?

Laura: El programa Help consiste en el hecho que los y las alumnas reciben un mensaje de ayuda falso con un mapa topográfico y coordenadas que provienen de la República Democrática del Congo, indicando una mina. A partir de aquí, se tratan temas como la latitud, longitud, extracción de minerales y las implicaciones éticas detrás del coltan de los teléfonos móviles. Este trabajo culmina en una campaña de concienciación dirigida a los vecinos y vecinas del barrio.

Por otra parte, lo Urban Garden es una asignatura optativa en la cual el alumnado cuida de un pequeño huerto escolar. Los estudiantes aprenden a planificar el huerto, a seleccionar las frutas y verduras de temporada y a coordinarse para cultivarlas. Los productos del huerto se sortean entre todas las personas que quieran llevárseles a casa para consumirlos.

Instituto Narcís Monturiol

Mateo y Vega, alumno y profesora.

¿Qué aprendizajes o conocimientos nuevos adquiristeis durante el acto? ¿Y durante el curso?

Mateo: Durante el acto, me di cuenta de que no somos el único instituto de Barcelona que trabaja por la sostenibilidad y pude descubrir proyectos muy bien realizados y con mucha calidad en centros muy próximos en el nuestro.

Por otra parte, formar parte de los delegados verdes me hizo entender el valor de las cosas y que tenemos que cuidar este planeta porque no tenemos otro. Cuando sea grande, no quiero vivir en un mundo lleno de residuos.

Vega: Yo tuve la oportunidad de hablar con las compañeras del Instituto Anna Gironella de Mundet sobre su proyecto sostenible, que consistía en cultivar rosas y venderlas por Sant Jordi como aparte de un Aprendizaje y Servicio (APS). Este intercambio me permitió conocer otras formas de llevar a cabo proyectos sostenibles y me inspiró a pensar nuevas iniciativas para nuestro instituto.

¿Qué aprendizaje te llevaste a casa después del acto?

Mateo: Que tenemos que reducir el consumo y tener más cuidado de las cosas. Todo tiene un valor y ocupa un espacio, y los objetos no desaparecen cuando los tiramos. Aunque alguna cosa ya no nos sea útil a nosotros, puede serlo para otra persona, y su vida útil puede continuar. Así, en lugar de ver el final de la vida de un objeto, podemos verlo como un nuevo inicio.

¿Podríais explicar cómo funciona el concurso de “clase más limpia y que más recicla” que organizáis cada curso?

Mateo: Los y las maestras entran a las aulas un par de veces al trimestre para evaluar como las estamos recogiendo. Valoran si reciclamos y si todo está bien limpio y cuidado, incluyendo las mesas, los cajones y el suelo. Más tarde, los Delegados Verdes se reúnen con el equipo docente para decidir qué clase ha ganado, y la clase ganadora recibe media hora de patio extra como premio.

¿Destacaríais algún otro proyecto que hayáis llevado a cabo este curso?

Vega: Sí, el huerto escolar y ecológico es un proyecto que nos gusta mucho. Muchos alumnos que viven en la ciudad nunca han tenido la oportunidad de trabajar la tierra, y esta iniciativa les permite experimentar el ciclo biológico de primera mano. Este año hemos tenido problemas con la sequía, pero eso nos ha llevado a encontrar soluciones para recoger y reutilizar el agua, permitiéndonos explorar temas tecnológicos. Finalmente, lo conseguimos salir adelante a pesar de las dificultades.

CEIR-ARCO Villarroel

Mar, Alba y Joan, profesoras y profesor.

¿Podéis explicarnos qué proyectos sostenibles habéis llevado a cabo este curso?

Mar: Este curso el alumnado del módulo de mecánica ha construido nuevos planteles, y los estudiantes de farmacia han plantado dentro plantas medicinales, aprovechándolo desde un punto de vista científico. Además, el alumnado de educación infantil ha creado envoltorios sostenibles y reciclables y los del ciclo de mecánica organizaron un taller para hacer rosas de Sant Jordi con materiales reciclables.

Alba: Durante este curso también hemos creado una Comisión de Sostenibilidad y Convivencia que se ha reunido habitualmente para tratar temas como el consumo responsable en el centro. Cada clase tiene un representante que aporta ideas a la comisión y al mismo tiempo comunica las iniciativas que se quieren llevar a cabo al resto de cursos y equipo docente.

¿Tenéis alguna iniciativa o novedad pensada para el curso próximo para extender la cultura de la sostenibilidad al centro?

Joan: Tenemos la intención de continuar con las iniciativas que hemos llevado a cabo este año. Además, habrá un cambio en el currículum del centro, con la incorporación de un módulo específico sobre sostenibilidad. Este mes de junio, el claustro se reunirá para discutir cómo podemos ampliar la cultura de la sostenibilidad en toda la escuela.

¿Puedes compartir alguna propuesta de los estudiantes que haya destacado por su innovación al promover el consumo responsable en el centro?

Joan: Me gustaría resaltar una propuesta que, a pesar de ser sencilla, es muy efectiva. Con sólo unas bridas, hemos conseguido reducir significativamente el consumo de agua a los grifos de los lavabos. Creemos que con un coste tan bajo, estamos contribuyendo de manera considerable a la reducción de nuestro consumo de agua.