Inspirándose en su colaboración con la artista francohúngara Vera Molnár y su exploración desde 1959 de una “máquina imaginaria” (un conjunto de procedimientos lógicos que permiten producir imágenes separando las operaciones de diseño y producción) y la resonancia de las palabras de Sol LeWitt, según las cuales “la idea se convierte en una máquina que crea arte”, Joanie Lemercier presenta una máquina que genera composiciones geométricas mínimas en la escala de una fachada. Con un programa complejo que genera composiciones visuales, sonoras y de animación casi infinitas, el público asiste a la puesta en escena del proceso de la "fábrica del arte": las iteraciones se desplazan y la máquina “escoge” detenerse en una combinación aleatoria de elementos. El proceso desarrollado a través de esta instalación entre la determinación del artista y la indeterminación del accidente y el azar, desmitifica los límites de la tecnología y es crítico con la idea de una inteligencia artificial milagrosa, esta ilusión distópica según la cual una máquina podría, en definitiva, "pensar" mejor que el humano.

Concepto y código generativo: Joanie Lemercier
Arquitectura de música generativa: Before Tigers
Dirección artística Studio Joanie Lemercier: Juliette Bibasse
Producción: Nicolas Roziecki
Desarrollo técnico: Martin Pirson

Joanie Lemercier es un artista visual francés y activista medioambiental. Sus proyectos exploran la percepción humana mediante la manipulación de la luz en el espacio. Trabajando principalmente con la proyección de luz y la programación informática, transforma la apariencia de objetos y formas cotidianos, doblando la realidad en su imaginación. En los últimos años, Lemercier se ha preocupado cada vez más por el cambio climático y la degradación del medio ambiente, y colabora activamente con su talento artístico focalizado en la proyección con causas y grupos activistas como Extinction Rebellion, así como desarrollando un nuevo trabajo, Slow Violence, que analiza los efectos devastadores de la minería del carbón en uno de los bosques más antiguos de Europa. Trabaja con proyecciones desde el 2006 y cofundó el sello visual AntiVJ en el 2008. Representado por una galería con sede en Nueva York desde el 2010, fundó su propio estudio creativo en Bruselas en el 2013, cuya dirección artística asumió Juliette Bibasse.