Por Andreu Gomila

A finales del junio pasado, la compañía de circo australiana Gravity & Other Myths inauguraba el Festival Grec con 'The Pulse'. Sobre el escenario, aparte de sus acróbatas, estaba el Cor de Noies del Orfeó Català, en una colaboración que no se limitaba a ser un bonito añadido, ni a cantar un par de canciones, sino que se trataba de una auténtica fusión de circo y canto coral cocinada durante un año. Más allá de Barcelona, la versión barcelonesa de 'The Pulse', con el Cor de Noies, visitó Montreal, Galway y Graz, en la que fue, según Buia Reixach, la directora del grupo de cantantes, la gira más extensa que ha hecho un coro del Palau, con un total de dieciocho funciones.

LA PREPARACIÓN
Reixach remarca que la buena simbiosis entre su formación y la tropa liderada por el director de escena Darcy Grant se debe a que ha sido “una experiencia muy intensa”, que empezó en agosto del 2022, en Edimburgo, cuando ella misma asistió a una función del espectáculo y se reunió con Grant y el compositor Ekrem Eli Phoenix. A partir de entonces se fueron encontrando en línea, hasta junio del 2023, cuando Phoneix vino a Barcelona para trabajar con el coro, después vino Grant y, finalmente, los acróbatas, en un trabajo “por capas”.
    “Las chicas lo han vivido todo de manera bestial”, apunta Reixach, que deja claro que el Cor de Noies del Orfeó Català es una formación no profesional que, de repente, se vio inmersa en un entorno “muy profesional”, con el reto de estar siempre “a la altura” en cada función.

RETO
Para Reixach, el principal reto que tenían en frente era este, no bajar el nivel. “Hemos vivido una experiencia tensionada, en el sentido más positivo de la palabra”, dice. Recuerda que las cantantes son muy jóvenes y ha tenido que poner especial énfasis en el hecho de que cuidaran “cabeza y cuerpo” durante la gira. Una tournée que las ha llevado a dos continentes, a inaugurar tres festivales y ante audiencias muy diferentes.

MONTREAL, GALWAY, GRAZ
La primera función lejos de casa del Cor de Noies fue, precisamente, en la meca del circo contemporáneo, en Montreal (Quebec). “Encontramos a un público muy experto, acostumbrado a espectáculos como el nuestro y a este formato, que, como en los conciertos de jazz, sabía en todo momento cómo reaccionar”, apunta la directora.
    En Galway (Irlanda), el escenario cambió y se encontraron, recuerda, “un público más formal”. La guinda del pastel fue en Graz (Austria), ya que interpretaron 'The Pulse' en un teatro de ópera. Allí se dieron cuenta de que no había fronteras entre las artes realmente, que sí, se podía hacer circo en un teatro donde días antes había sonado Wagner.

FUTURO
“Hemos conocido a una compañía y unas maneras de hacer con las que nos hemos entendido muy bien”, señala Reixach. Y se han quedado con ganas de repetir. Cree que volverán a hacer más bolos de 'The Pulse'. Por norma, Gravity colabora con un coro local para sacar adelante el espectáculo, pero podría ser que eso no fuera posible y que las reclamaran. ¿La razón? “Hubo una comunión total entre nosotros, un feeling muy bestia”, indica Reixach.
    En algunos momentos libres, indica la directora del Cor de Noies, hicieron algún laboratorio entre las cantantes y los acróbatas, alejado de 'The Pulse', solo para probar la posibilidad de hacer cosas nuevas en el futuro.

EXPERIMENTACIÓN
La colaboración del Cor de Noies con Gravity & Other Myths no es la primera de la formación barcelonesa. “Hemos cogido fama de hacer cosas que se salen un poco de lo habitual”, dice Reixach. Por ejemplo, en febrero del 2020 actuaron en el Mercat de les Flors con Kukai Dantza para hacer posible 'Erritu'. Y en junio del 2022 acompañaron a Maria Arnal al Sónar.
    “Me gusta nuestro estilo clásico, cantar Mendelssohn y Pergolesi, pero cada vez más tengo la convicción de que las distintas disciplinas artísticas tienen que relacionarse más”, apunta Reixach. A ella le gusta mucho “experimentar” con otra gente y darse cuenta de que “dicen lo mismo que tú, pero con otro lenguaje”, es decir, “las pasiones y angustias del ser humano”.

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