La creación más conocida de Pedro Calderón de la Barca se estrenó en 1635 y, por lo tanto, nos separan del momento en que se escribió casi cuatro siglos. Aun así, La vida es sueño sigue siendo un texto de una contemporaneidad extrema, quizá porque se plantea asuntos atemporales que ni tenían respuesta en aquel momento ni la tienen hoy. ¿Qué es la realidad? ¿Qué relación tengo con el Estado, con mi familia o conmigo mismo? ¿Es la realidad tan insustancial como parece? Se lo preguntaba Calderón por boca de Segismundo, su protagonista, cuando narraba la historia del hijo de un rey que, a causa de una profecía que dice que será un monarca injusto y tiránico, es encarcelado por su padre y encerrado en una mazmorra oscura. Cuando salga, le harán creer que la realidad que ve no es más que un sueño, para observar su comportamiento y devolverlo a la celda si es necesario. La trama nos aboca a cuestiones inquietantes sobre la realidad y la relación que tenemos con ella, unos interrogantes que estaban tan vivos ayer como hoy y que no afectan solo a los intelectuales, sino que aluden al conjunto de la humanidad. Un príncipe encadenado, una mujer que se hace pasar por hombre en busca de venganza, amor, revuelta... El director Declan Donnellan y el escenógrafo Nick Ormerod, codirectores artísticos de la compañía inglesa Cheek by Jowl, aportan su visión del mundo de la escena a un clásico de las letras castellanas que han trabajado conjuntamente con la Compañía Nacional de Teatro Clásico que dirige Lluís Homar.
El montaje consolida la relación entre Cheek by Jowl y el teatro español, que empezó en 1989 con la producción de Fuenteovejuna que se vio en el National Theatre de Londres. Ahora, Cheek by Jowl regresa al Siglo de Oro con la primera producción en castellano, que dirige Declan Donnellan y ha diseñado Nick Ormerod. Hemos visto a la compañía en el Grec del año 1994 representando Measure for Measure, de William Shakespeare y en el Grec 2014 llevando a escena el Ubú Rey de Alfred Jarry. A la Compañía Nacional de Teatro Clásico la pudimos ver en la edición del Grec del año pasado, poniendo en escena El burlador de Sevilla, con dirección de Xavier Albertí.
Una coproducción de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, Cheek by Jowl y LAZONA
Con la colaboración de Barbican (Londres) y Scène Nationale d'Albi (Francia).
La función del día 10 de julio, a las 22.00 h dispondrá de un servicio de audiodescripción y acompañamiento para personas con discapacidad visual.
Adaptación: Declan Donnellan, Nick Ormerod. Dirección: Declan Donnellan. Diseño de la escenografía y el vestuario: Nick Ormerod. Interpretación: Ernesto Arias, Prince Ezeanyim, David Luque, Rebeca Matellán, Manuel Moya, Alfredo Noval, Goizalde Núñez, Antonio Prieto, Irene Serrano. Diseño de la iluminación: Ganecha Gil. Diseño de sonido y composición: Fernando Epelde. Asesoramiento en dramaturgia: Pedro Villora. Movimiento: Amaya Galeote. Ayudantía de dirección: Josete Corral. Ayudantía de escenografía: Alessio Meloni. Ayudantía de vestuario: Elena Colmenar. Ayudantía de sonido: Gastón Horischnik. Ayudantía de iluminación: Javier Hernández. Interpretación: Juan Ollero. Diseño gráfico y fotografía: Javier Naval. Dirección técnica: Oscar Sainz. Regiduría: Alex Stanciu. Maquinista: Sira González. Producción ejecutiva y gerencia: Elisa Fernández. Ayudantía de producción: Jair Souza-Ferreira. Dirección de producción: Miguel Cuerdo. Comunicación y distribución: Julio Municio. Dirección ejecutiva Cheek by Jowl: Niamh O´Flaherty Dirección general Cheek by Jowl: Harrison Collett Administración y ayudantía de dirección Cheek by Jowl: Harry McDonald
Espacio
Passeig de Santa Madrona, 36, 08038 Barcelona, Espanya