La cuarta edición de Comunitzar la Música juntó a artistas y otros profesionales y activistas culturales para reflexionar e intercambiar experiencias sobre formas de organización del sector desde la autogestión y la base. El Centre Cultural Albareda acogió el encuentro el mes de noviembre y ahora recuperamos las conclusiones del que se dijo en el videorresumen que ya tienes disponible aquí.

Este año, la propuesta organizada por la comisión de preguntas de la Plenaria del festival Acció Cultura Viva, puso el foco en las conexiones entre la música, las nuevas generaciones y la intergeneracionalidad, en la radio como canal de difusión y la accesibilidad en la escena musical autogestionada. Desde la Llobregat Block Party, colectivo activista de cultura Hip hop, presentaron una relatoría original y creativa con improvisaciones de rap a partir de las palabras clave propuestas por cada grupo de trabajo que resumían los debates vividos.

Así, desde el grupo de accesibilidad hablaron de “pasta” (dinero), inversión, prejuicios, normalización y mirada, de lo que salió una improvisación con una estrofa creada por todos los asistentes que reclamaba más inversión y apoyo para los proyectos de base el que los falta son recursos económicos y apoyo de la administración para sostener apuestas que son muy potentes en el ámbito comunitario y social, pero poco rentables económicamente.

Por su parte, el debate sobre las radios se centró en entender los diferentes proyectos de radios comunitarias y sus idiosincrasias así como se crearon vínculos para conocerse entre los que todavía no colaboran. Además, también realzaron el valor de lo comunitario, del directo y del encuentro personal ante la era de los creadores de contenido individualistas en las redes sociales. Los conceptos claves fueron lo “frente a frente”, algoritmo, pirata o comunidad.

El grupo que habló de intergeneracionalidad y de las nuevas generaciones destacó también la cara y la cruz de las redes sociales: la difusión extensiva y la pérdida de contacto humano. Además, también se abordó el equilibrio entre lo que se institucionaliza y lo que se mantiene en el underground, de los espacios seguros y del sentido de las comunidades culturales. Así, frases como “por amor al arte”, “la envidia es mala”, “la comunidad no es un escaparate”, “contradicciones” o “viejoven” fueron los conceptos aportados para resumir el debate.

La jornada se cerró con una batalla de rap entre los miembros de la Llobregat Block Party alrededor de todos los temas tratados para rematar una jornada de comunidad, cultura y proyectos levantados desde la base.