La pasión de editar en catalán

“Si preguntas a la gente de la calle qué es y qué hace un editor, no saben muy bien qué decir, piensan que eres una imprenta, un librero. No es un oficio muy conocido”. La respuesta de Maria Muntaner, editora de Lleonard Muntaner Editor, a Lourdes Toledo, la autora del libro L’aventura del llibre català, debe de ser uno de los motivos por los que la periodista valenciana emprendió la tarea de entrevistar a diecinueve editores y editoras de todos los Países Catalanes.

Es normal que el lector compre un libro por el título, por la cubierta, por la recomendación de un conocido o habiendo leído antes una reseña, y que no sepa qué editorial lo ha puesto en las estanterías de la librería. Y ahora todavía más, con la cantidad de editoriales que, afortunadamente, han ido surgiendo. Se lea habitualmente o no, la labor de los editores es más importante de lo que parece. Sus decisiones y su criterio constituyen, en gran medida, la conversación cultural de una sociedad.

Portada de L’aventura del llibre català. Portada de L’aventura del llibre català.

En la introducción del libro, Toledo hace referencia al librito La aventura del libro catalán, de Joan Fuster, editado en 1972, como referente. Pero a mí me ha traído a la memoria, Les nostres editores, de Magda Gregori (Editorial Fonoll, “La Mira”, 2023). Si Toledo entrevista a diecinueve editores, Gregori entrevistaba a veintiséis editoras, tres de las cuales aparecen en ambos libros: Laura Huerga (Raig Verd Editorial), Núria Iceta (L’Avenç) y Rosa Rey (Angle Editorial). Que últimamente se hayan publicado dos libros sobre el mundo de la edición debe significar que genera interés. Seguramente, eventos como la Setmana del Llibre en Català o la presencia en las redes sociales les dan ahora más visibilidad.

Lourdes Toledo ha trabajado como periodista en varios medios y ha publicado libros como Amèrica endins, Premio de Ensayo Mancomunitat de la Ribera Alta, o La inquietud, Premio de Ensayo Josep Vallverdú. En L’aventura del llibre català despliega un montón de preguntas destinadas a hacernos ver las dificultades, pero también el disfrute, de dedicarse a este oficio. La mayoría de los editores son también activistas culturales, sobre todo aquellos que empezaron en tiempos de la dictadura franquista, como Eliseu Climent, cuando las instituciones no existían y el catalán estaba prohibido. O la editorial Tres i Quatre, los Premis Octubre, Acció Cultural pel País Valencià y tantas otras iniciativas.

De la serie de entrevistas acaban surgiendo un puñado de dificultades y la forma de superarlas: la distribución más que deficiente de los libros en todos los territorios de habla catalana, la facilidad que tenemos de encontrar libros escritos en español en las librerías de Barcelona, Valencia o Palma y la invisibilidad de la edición valenciana, andorrana o balear en esas mismas estanterías.

La editora mallorquina Maria Muntaner dice que a menudo hacen coediciones con el editor valenciano Vicent Olmos, de Afers, para poder conseguir visibilidad en cada uno de los territorios. Y es esta dificultad, la distribución mutua entre las tierras de habla catalana, la que conlleva uno de los grandes problemas de nuestros editores: cómo incrementar el número de lectores y de ventas.

Además de los ya citados, Toledo entrevista también a Josep Cots, de 1984; Guillem Frontera y Miquel Campaner, de Ensiola; Joan Carles Girbés, de Ara Llibres; Josep Gregori, de Bromera; Josep Lluch, de Proa; Àngel Madrià, del Grup Gavarres; Josep Maria Muñoz, de L’Avenç; Eulàlia Pagès, de Pagès Editors; Aniol Rafel, de Periscopi; Jordi Raventós, de Adesiara; Joan Sala, de Comanegra; y Luis Zendrera, de Joventut. Existe diversidad tanto en la tipología como en las dimensiones de las empresas. Se explica también cómo se hace el traspaso de un trabajo tan pasional.

L’aventura del llibre català es una obra leíble que sitúa y explica las últimas décadas del mundo editorial catalán, debilidades y fortalezas incluidas. Quizá, para acabar de pasar de la anécdota a la categoría, hubiese estado bien incluir algunos datos generales, como los índices de lectura en cada uno de los territorios, la presencia del libro en catalán en las librerías, las facturaciones en cada lengua… Lo que señalaría por dónde hay que seguir trabajando para que, sobre todo en Valencia y en las Baleares —pero no exclusivamente—, la iniciativa a favor de la lengua y la cultura siga estando, en gran medida, en manos de los editores, escritores y activistas que la quieren.

L’aventura del llibre català:
Converses sobre edició entre dos segles
.
Lourdes Toledo.
Editorial Comanegra, 2024. 
272 páginas. 

El boletín

Suscríbete a nuestro boletín para estar informado de las novedades de Barcelona Metròpolis