Claudi Montañá, el artículo como obra de arte
- Libros
- Pliego de cultura
- Dic 20
- 4 mins
Claudi Montañá fue la voz más singular en la crítica musical de los años setenta. Nadie cómo él supo combinar en sus textos el periodismo de divulgación con la literatura de creación. Josep Maria Ripoll presenta una antología de su obra, con un excelente prólogo que incluye la biografía del personaje y sus referentes.
Fue la voz más singular en la crítica musical de los años setenta. Nadie cómo él supo combinar en sus textos el periodismo de divulgación con la literatura de creación. Les hablo de Claudi Montañá, de quien se acaba de publicar una antología a cargo de Josep Maria Ripoll. Bajo el título de Estoy hablando de mi generación, el libro recoge una selección de artículos publicados entre 1972 y 1977 en revistas como Vibraciones, Nuevo Fotogramas, Star, El Papus, Ajoblanco o El Viejo Topo.
Se trata de una edición muy cuidada, con un excelente prólogo de Josep Maria Ripoll que explora la biografía del personaje y sus referentes. Nacido el 13 de marzo de 1944 en Manresa, Montañá fue, a grandes rasgos, un idealista utópico y ferviente seguidor de los movimientos de liberación de los años sesenta (el movimiento hippy, la contracultura, la psicodelia, el mayo del 68…), que se sintió desengañado en la década siguiente al ver como el voraz consumismo del sistema lo iba integrando todo. Hombre de vasta cultura, a sus conocimientos musicales y cinematográficos unía su querencia por los poetas simbolistas y surrealistas franceses o por la generación beat norteamericana, cuyos textos intercalaba con maestría en sus artículos.
El grueso de la antología se divide en tres partes: “Rebeldías: del pop al underground”, “La euforia: el underground barcelonés” y “Derrotas: el fin del sueño”. El libro también incluye textos sobre Montañá que se publicaron después de su muerte, acaecida en agosto de 1977 en el antiguo hotel Manila de la Rambla barcelonesa, tras tomar tres tubos de somníferos. Entre estos textos encontramos uno de Eduardo Haro Ibars, donde subraya que “intentó hacer un tipo de crítica musical nuevo entre nosotros, al menos en lo que a música popular se refiere, un tipo de crítica con calidad literaria, y basado sobre todo en los sentimientos, en la postura vital y el estado de ánimo de quien se encuentra condicionado por ese fenómeno que es el rock; trató, en suma, de traducir el lenguaje de la música al literario”.
La antología se abre con toda una declaración de principios: “Escribir artículos también es escribir”. Montañá incide en la subvaloración que se da al periodismo y considera anacrónica la jerarquización que se establece entre los diversos géneros literarios: “Creo que ya es hora de acabar con estas absurdas diferenciaciones y fijarse de una vez en lo realmente importante: lo escrito. Con independencia de que esté en un libro, en un periódico, en un muro de la calle, en una revista o en un lavabo. Menos ostentación y más comunicación. ¿No es eso?”.
Los artículos de Montañá son verdaderas obras de arte que no envejecen con el tiempo y dan un testimonio fresco y palpitante de una época irrepetible.
Y es que, como demuestra este libro, los artículos de Montañá son verdaderas obras de arte que no envejecen con el tiempo y dan un testimonio fresco y palpitante de una época irrepetible. En este sentido, cabe hacer especial hincapié en el texto que da nombre al libro, un asombroso mosaico escrito en prosa poética, en el que recrea los convulsos sesenta y primeros setenta relacionándolos con letras significativas de canciones de rock. Ya en un plano más local, sus textos sobre el underground barcelonés son oro puro. Desde “Rayos de sol en las catacumbas de nuestra música”, donde refleja el paso de la música progresiva a la onda layetana, hasta una entrevista-paseo con Sisa de lo más experimental, en que por momentos se intercambian los papeles y el entrevistador pasa a ser entrevistado. Cierra esta magnífica antología un sobrecogedor “testamento”, con citas de Ferrater, Cioran, Borges y Baudelaire, que puso punto final a su sección de correo en Vibraciones: “Estoy a punto de concluir este mi último ‘Correo’ y experimento un agridulce sentimiento de tristeza. Es el regreso de un viaje, lo sé, la bajada siempre llena de baches en el aire soleado de la mañana. Invierno, casi. Los pájaros empiezan a morir de frío en las inhóspitas cornisas. Y ni tú, ni yo, ni nadie sabemos qué hacer... Pero si yo fuese todavía el que creo ser, imaginaría el invierno cubierto de seda. Os beso. Chao”.
Claudi Montañá. Estoy hablando de mi generación (Artículos 1972-1977)
Antología y prólogo de Josep Maria Ripoll
Ajuntament de Barcelona, 290 páginas
Barcelona 2020
El boletín
Suscríbete a nuestro boletín para estar informado de las novedades de Barcelona Metròpolis