Another Moon, del colectivo surcoreano Kimchi and Chips, hará aparecer en el cielo de Barcelona una segunda luna, un satélite que responde a un espectacular artificio tecnológico y que es climáticamente consciente. Esta luna es el resultado del cruce de unos potentes rayos láser proyectados contra el cielo nocturno para crear una forma tridimensional que podrá avistarse hasta una distancia de un kilómetro. Los rayos se alimentan de baterías solares. Del mismo modo que la Luna se hace visible gracias a la luz reflejada de nuestro Sol, esta segunda luna es posible gracias a la energía solar acumulada durante el día y liberada por la noche, una energía finita y efímera para despertar la conciencia de nuestra dependencia de fuentes de energía que proceden de combustibles fósiles. Another Moon es la culminación del proyecto artístico “Drawing in the Air”, iniciado hace seis años como una serie de instalaciones que combinan la teoría de la relatividad, la filosofía budista y el dilema contemporáneo entre imagen y realidad.

Los artistas quieren agradecer el apoyo de RAG Stiftung, Arts Council of Korea, LaserAnimation Sollinger, Korean Culture Center y Korean Arts Management Service​.

Kimchi and Chips es un colectivo artístico con sede en Seúl y fundado el 2009 por el surcoreano Mimi Son y el inglés Elliot Woods. Su práctica creativa se basa en el reconocimiento de que las artes, las ciencias y la filosofía no son disciplinas lejanas que se tengan que unir, sino que actúan como mapas alternativos sobre el mismo territorio, y que utilizar esos mapas en tándem permite navegar por el territorio con mayor facilidad. Su trabajo se ha presentado en el National Museum of Contemporary Art de Seúl, el ZKM Center for Art and Media de Karlsruhe, la Somerset House de Londres, los SXSW Conference and Festivals de Austin, el Ars Electronica Festival de Linz, el Asia Culture Center de Gwangju, el Zeche Zollverein de Essen y el festival Resonate de Rosmalen. Han sido galardonados con premios y distinciones por el Ars Electronica, por la Media Architecture Biennale, por Creative Applications y por la revista digital especializada Darc Magazine.