Los servicios municipales han atendido a 12.000 personas refugiadas de Ucrania
El grueso de las atenciones, con un total de 7.700 personas en solo doce semanas, lo ha hecho Ucrane, el nuevo equipamiento de emergencias sociales que abrió en abril para concentrar el apoyo a la comunidad ucraniana. Además, se han facilitado 1.740 empadronamientos.Ucrane ha prestado servicio a 3.280 núcleos familiares, de los que casi 700 han recibido ayudas económicas a través de la tarjeta Barcelona Solidària, por un valor de 147.000 euros. Antes de la creación de Ucrane, los servicios de atención social de la ciudad tuvieron que adaptarse para atender a las personas que llegaban a Barcelona huyendo de la invasión a Ucrania. El Servicio de Atención a Inmigrantes, Emigrantes y Refugiados (SAIER) atendió a 2.300 personas y el Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB) a 2.000.
De los 1.740 empadronamientos que se han efectuado, 916 corresponden a mujeres, 300 a hombres y 524 a menores. Los tres distritos donde más se han hecho son Sant Martí (352), L’Eixample (287) y Sarrià-Sant Gervasi (221). También son los distritos donde se han escolarizado la mayoría de los 584 alumnos provenientes de Ucrania, según datos del Consorcio de Educación de Barcelona (CEB). En total se han inscrito 153 menores en infantil, 295 en primaria y 136 en secundaria.
Los datos del Ministerio del Interior del Estado muestran que el 14,5 % de los permisos de residencia otorgados a población ucraniana se han dado en Barcelona, aunque la población de la ciudad respecto al total del Estado no llega al 4 %.
Alianzas entre servicios municipales, entidades y ciudadanía
Aparte de los dispositivos de atención y de urgencias y emergencias sociales, el Ayuntamiento ha puesto en marcha varias iniciativas en colaboración con otras entidades para facilitar la acogida y la integración en la ciudad desde una perspectiva transversal.
Los servicios municipales han coordinado la fase cero de la acogida con la Cruz Roja y también gestionan un punto de atención dentro de Fira Barcelona, donde se encuentra uno de los dispositivos de llegada organizados por el Estado. En colaboración con Transportes Metropolitanos de Barcelona, también se han facilitado títulos de transporte público.
En Barcelona Activa se ha creado una oficina para favorecer la incorporación laboral del conjunto de personas refugiadas provenientes de Ucrania. En la primera semana de actividad ha atendido a 62 personas (10 hombres y 52 mujeres).
Respecto al cuidado de la salud mental de las personas recién llegadas de Ucrania, en colaboración con el Colegio de Psicología de Cataluña, se ha puesto en marcha el programa de apoyo y ventilación emocional.
También se ha generado una oferta de actividades de ocio gratuitas, especialmente para menores de 4 a 18 años de familias que se encontraban alojadas en hoteles. Han participado 730 personas refugiadas a través de seis entidades sociales: la Fundación Adsis, la Fundación Centre Educatiu i de Lleure (CEL), la Fundación Pere Tarrés, la Fundación Servei Solidari, Intress y Salesians Sant Jordi.
Entes municipales como Barcelona de Servicios Municipales (BSM), el Parque de Atracciones del Tibidabo, el Instituto Barcelona Deportes (IBD) o el Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB) han participado proporcionando entradas, igual que otras organizaciones como el Cosmocaixa y el Museo del Barça.
La oferta se mantendrá en verano a través de dos programas. Por una parte, la ampliación de plazas del programa «En verano, Barcelona te acoge», que pasa este año de 140 a 240 plazas para jóvenes de origen ucraniano de entre 14 y 18 años. Por la otra, se extiende el programa de los centros de verano para menores de 5 a 13 años que organiza el Instituto Municipal de Servicios Sociales (IMSS).
Los barceloneses y barcelonesas también han desarrollado varias iniciativas solidarias para apoyar a las personas que llegan de Ucrania. El Ayuntamiento ha recogido este conjunto de actividades en el web ciutatrefugi.barcelona, donde también se incluye información útil en ucraniano gracias a la colaboración de intérpretes aportados por la Federación Catalana de Voluntariado Social.