En marcha las obras del nuevo paseo de la Gran Vía sobre los túneles de las Glòries
Este lunes, 22 de enero, empiezan las obras que transformarán la Gran Via de les Corts Catalanes sobre los túneles viarios en un gran paseo, lleno de verde y espacios de estancia para el vecindario, que conectará con el nuevo parque de las Glòries. Con la apertura de los dos túneles a principios del 2022, esta arteria, por donde circulaban miles de vehículos cada día hasta aquel momento, quedó completamente vacía. El Ayuntamiento de Barcelona realizó una urbanización provisional, con pintura y mobiliario temporal, pero ahora llega el momento de las obras definitivas.El Distrito de Sant Martí da el pistoletazo de salida a la urbanización definitiva de la Gran Vía, que pasará de ser una autopista urbana a ser un gran paseo de 21 metros de ancho, que facilitará la conexión entre los barrios del entorno. El nuevo espacio que gana la ciudad estará caracterizado por este amplio paseo central, que incluirá numerosas zonas de estancia y de juego. En total, se renovarán casi 70.000 metros cuadrados. Las obras que hoy empiezan son las del lado de montaña, que durarán un año. Cuando se acaben, se abordará el lado de mar, que finalizará durante la primavera del 2026.
Aceras anchas, un paseo de 21 metros y zonas de estancia y de juego
En el lado donde están los edificios de viviendas habrá una acera que irá de los 5,25 a los 7,35 metros de ancho, con un cordón de servicios y un carril de plataforma única que integrará el paso de bicicletas, el tráfico vecinal y los vehículos de servicios. En el otro lado, el del centro comercial, habrá una acera de 4 metros, un carril de uso local y bicicletas y un espacio para el tranvía desdoblado y buses en doble sentido. Por lo tanto, se priorizará la movilidad sostenible, los recorridos a pie y los usos ciudadanos, a diferencia de la configuración anterior a la puesta en marcha de los túneles, cuando había ocho carriles para vehículos.
Y en el centro de la Gran Vía se creará un gran paseo de 21 metros de ancho que incluirá espacios de estancia con bancos y sillas, zonas de juego y mobiliario lúdico. También se mantendrán los elementos de calistenia existentes, que se reubicarán cuando terminen las obras. Además, también se configurará un espacio para acontecimientos temporales, como ferias o fiestas. La mayor parte de este espacio se urbanizará durante la primera fase de obras.
Estos espacios tendrán pavimentos con colores claros, que permitirán reducir el efecto de isla de calor en verano. Además, se favorecerá la gestión del ciclo del agua y se instalará una nueva iluminación con farolas a escala humana. Cuando acabe la situación de sequía se plantarán cuatrocientos árboles más.