Los artificios acentúan las debilidades que queremos esconder

El origen del espectáculo firmado por el artista circense y bailarín Alexander Vantournhout, nacido en Flandes, tiene como punto de partida una anécdota curiosa: un colega de profesión le dijo que tenía el cuello muy largo e hizo un juego de palabras con su nombre y el cuello (neck en inglés). El resultado fue ANECKXANDER. Una autobiografía trágica del cuerpo, un elaborado estudio de las proporciones físicas que este creador de técnica virtuosa lleva al Mercat de les Flors, y que se perfila como una de las sorpresas de este Grec.

P. ANECKXANDER es un solo en busca de la identidad?

R. He aprendido mucho sobre las proporciones de mi cuerpo y del de los demás. Sobre cómo está construido, que los brazos tienen una extensión diferente... He observado que hay personas que pierden antes el equilibrio, seguramente porque tienen el centro de gravedad más elevado. De esta forma se puede especular sobre quién será mejor atleta. Un boxeador, por ejemplo, necesita tener los brazos largos y el torso corto. Con ANECKXANDER he indagado en la propia identidad y en la de los demás.

P. Por qué cuenta la historia por la vía trágica?

R. Me acerco a los espectadores como un individuo solitario. Y esta soledad está relacionada y deriva de la situación dramática de ser un artista solo ante el público.

P. Cuál ha sido el mayor reto para hacer ANECKXANDER?

R. El gran desafío es rasurarme la cabeza cada vez, calentar durante horas antes de la función, estar desnudo y solo en el escenario, seguir una dieta específica...

P. Definiría su espectáculo de radical?

R. ANECKXANDER es un espectáculo consecuente. La coreografía se creó con la presión añadida de no tener música ni vestuario, con pocos objetos... Efectivamente, la creación fue radical. Pese a todo, me parece una propuesta accesible e interesante para muchos espectadores tanto por su intención como por su contenido.

P. Cómo consigue ser tan flexible y doblarse como un chicle?

R. Estudié cómo podía llegar a ser más flexible: ioga iyengar, diversas escuelas de contorsión, juegos con cuerdas... Al final, mi vocabulario en ANECKXANDER es fruto de una investigación. Con 26 años, sólo puedes doblarte en uno o dos niveles. La contorsión es en este espectáculo un juego de ángulos, de coreografía y de mostrar mis desproporciones. Es decir, mis imperfecciones. Tengo una nuca larga, pero cómo puedo mostrar esta singularidad?

P. La fusión de circo y danza está presente en todos sus espectáculos. Qué le importa más de cada uno de ellos?

R. No diferencio entre formas de arte y tampoco mezclo géneros. Hago circo coreografiado. El circo es ante todo una forma de danza o de teatro y es también la inspiración de esta pieza porque, en mi opinión, el circo no existe sino se relaciona con los aparatos. En ANECKXANDER uso prótesis que me sirven para camuflar o corregir mis debilidades o desproporciones. Llevo unos zapatos de plataforma (Buffalo) para disimular las piernas cortas, y guantes de boxeo para protegerme los puños. Pero como pasa normalmente con los artificios, éstos acentúan las debilidades que teóricamente queremos esconder

P. El circo contemporáneo minimalista para adultos está todavía poco explorado?

R. Efectivamente. El virtuosismo y la investigación sobre el movimiento no se ha valorado demasiado en los últimos años. Puedo entender, pero detesto, a la gente que no entiende que los movimientos depurados son figuras intelectuales y artísticas que contienen mucha información. Ése es el combate a ganar por parte de un género bastante nuevo.