Parque de Sant Martí

C Menorca, 64

El de Sant Martí es un gran parque comunitario: una plaza recogida bajo un arbolado espeso.

El parque tiene en su parte más grande la forma de un gran triángulo irregular, completamente cubierto de césped y lleno de árboles dispersos. El pavimento es escaso, el imprescindible para cruzar el triángulo de punta a punta o bordearlo y para acceder al espacio desde la ronda de Sant Martí.

Historia

Este parque se creó en unos antiguos campos de cultivo entre los muchos que, hasta mediados de siglo pasado, ocuparon buena parte del distrito de Sant Martí, uno de los últimos reductos de la Barcelona agrícola. El espacio forma parte del casco antiguo de la Verneda de Sant Martí. Ya desde el siglo XVI, este núcleo lo formaban la parroquia de Sant Martí de Provençals, la rectoría, el hostal, las masías y las otras construcciones rurales diseminadas por el término.

Biodiversidad

En la parte más ancha del parque, el césped comparte protagonismo con los árboles. Las grandes copas de los palo rosas (Tipuana tipu), que ofrecen una buena sombra a quienes la desean, contrastan con la esbeltez de los cipreses (Cupressus sempervirens). Son dos de las muchas especies arbóreas que hay, cuya diversidad es fruto de las plantaciones populares que se han hecho en este espacio verde.
Muy cerca de los accesos por la ronda de Sant Martí, unos álamos altísimos (Populus alba) —muy abundantes por todo el parque— se reflejan en las aguas de un estanque. Junto al agua, un inmenso olmo de Siberia (Ulmus pumila) destaca por su magnificencia. En uno de los extremos del parque, una hilera de alisos (Alnus glutinosa), en catalán verns, nos recuerda los árboles primigenios que dieron nombre a la zona.

En diferentes puntos del parque, los naranjos (Citrus sinensis) y los olivos (Olea europaea) constatan el pasado agrícola de este espacio verde de Barcelona.

Arte y arquitectura

Entrando por la calle de la Agricultura, en el otro extremo de una gran plaza, encontramos la parroquia de Sant Martí. Esta es una zona bastante singular del parque, donde sobre todo destacan los elementos arquitectónicos que han perdurado a lo largo del tiempo: la iglesia y las masías de Can Cadena, Can Planas y Ca l’Arnó, que actualmente son sede de diferentes equipamientos del distrito.

En la masía de Can Cadena, situada en el interior del parque, hay uno de los huertos urbanos de Barcelona, con 16 parcelas cultivadas por personas mayores del distrito, que ocupan un total de 800 m2. También hay corrales con animales de granja, un área de compostaje y un aula de formación en agricultura ecológica.

Eso ha hecho posible que, dentro del programa de educación medioambiental, Parques y Jardines ofrezca a las escuelas actividades destinadas a dar a conocer las técnicas de la agricultura biológica y los animales más comunes de la granja: corderos, gallinas, ocas, conejos…

Otro aspecto ambiental que debe destacarse es la central de captación fotovoltaica que tiene la masía y que genera cerca de 8.724 kWh/año, el equivalente al consumo eléctrico anual de cuatro viviendas de 80 m2. La energía producida permite ahorrar 940 kg/año de emisiones de CO2 a la atmósfera.

Paisajismo y diseño

Una vez hemos atravesada la calle de Menorca —que en este tramo está cortada a la circulación de vehículos—, hay otra parte bien diferenciada del parque. Es una plaza grande, umbría y silenciosa, rodeada de árboles y con un espacio amplio pavimentado donde, por ejemplo, se puede jugar a pelota. En los dos extremos superiores de la plaza, un área de juegos infantiles y una zona con bancos, rodeadas de setos vegetales, invitan a pasar un rato tranquilo, lejos del ruido de la ciudad.

  • Teléfono
    Tel.: 010
  • Accesibilidad
    Accesible para personas con disminución física
  • Titularidad
    Centro público
Dirección:
C Menorca, 64
Districte:
Sant Martí
Barrio:
Sant Martí de Provençals
Ciudad:
Barcelona