Barcelona

Es un ejemplo de la recuperación iniciada en Barcelona durante la década de 1980 de terrenos ocupados por servicios e industrias desaparecidas o trasladadas a otros lugares del Área Metropolitana de Barcelona.
La antigua industria que da nombre al parque era una empresa textil fundada por la familia Muntadas en 1847 y se convirtió en la primera sociedad algodonera de España: la España Industrial, Sociedad Anónima Fabril y Mercantil.
La fábrica, situada entonces en el municipio de Sants, fue popularmente conocida como el Vapor Nou (Vapor Nuevo), en contraposición al nombre de la otra gran industria textil de este municipio: el Vapor Vell (Vapor Viejo). Siempre fue una de las fábricas textiles más modernas, dedicada a hilar, tejer y estampar algodón. En 1880 daba trabajo a 2.500 personas. En 1969 la fábrica cerró y se vendieron los terrenos.
En 1985, después de una serie de reivindicaciones vecinales, el solar de la antigua fábrica se destinó a la construcción de viviendas y a la creación del parque actual. Con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992 se construyó un gran polideportivo, también denominado de la Espanya Industrial, donde se celebraron las pruebas de halterofilia y que se ha convertido en un importante equipamiento deportivo del distrito de Sants-Montjuïc.

Cuando finaliza la lámina de agua donde se vierten las ramas de unos cuantos sauces llorones (Salix babylonica) empieza una gran extensión verdísima de césped, solo interrumpida por un par de hileras de ciruelo rojo (Prunus cerasifera Atropurpurea), que dan un contrapunto rojizo muy hermoso.
Al fondo de este prado, casi siempre con visitantes estirados tomando el sol, empieza una zona de bosquecillo con encinas (Quercus ilex), leylandis (Cupressocyparis leylandii), pinos piñoneros (Pinus pinea) y plataneros (Platanus x hispanica). En verano, esta última especie protege con su sombra la zona del parque donde están los servicios.
Dentro del estanque, los cipreses (Cupressus sempervirens) se elevan sobre las plataformas de hormigón que, de vez en cuando, se adentran en la lámina de agua.
El lago del parque de la Espanya Industrial tiene una extensión aproximada de 10.000 m2 y es el segundo lago más grande de toda la ciudad. Desde que acabaron las obras de rehabilitación en diciembre del 2009, se han instalado dispositivos de recirculación del agua y se ha hecho efectiva su conexión a la red de agua freática que llega desde el parque de Joan Miró. Esto permite ahorrar anualmente 26.000 m3 de agua potable.

El drac, inmenso y con las alas bien abiertas y la cola que cae hacia el estanque, es obra del vasco Andrés Nagel.

Dentro del agua se encuentra Neptú, una escultura realizada en 1881 por Manuel Fluxà. En una de las orillas del estanque, sentada sobre una roca, está Venus moderna. Es una escultura que José Pérez Pérez, “Persejo”, realizó en 1929 para la Exposición Universal de Barcelona.
Son también de la primera mitad del siglo XX Tors de dona, una copia en bronce de la pieza de piedra modelada por Enric Casanoves en 1947, y Bous de l’abundància, hecha en 1926 por Antoni Alsina. Aún hay dos esculturas más, muy contemporáneas. Se trata de Landa V (1985), de Pablo Palenzuelo, y Alto Rhapsody (1985), del escultor inglés Anthony Caro.
En cuanto a los elementos arquitectónicos, destacan las imponentes nueve torres faro, creadas por el arquitecto Luis Peña Ganchegui, autor del proyecto del parque y también las edificaciones de la antigua Espanya Industrial que se han conservado, como la Casa del Mig, reconvertida en casal de niños, y la arcada de la puerta de acceso al antiguo complejo industrial por la calle de Muntadas.