Descubre la antigua sede de la editorial Gustavo Gili
Ejemplo de arquitectura racionalista de finales de los cincuenta, el edificio se convertirá en el nuevo Centro de Cultura y Educación de Barcelona.
En el número 87 de la calle Rosselló encontramos la antigua sede editorial Gustavo Gili. Es un edificio obra de los arquitectos Joaquim Gili (sobrino del fundador de la editorial) y Francesc Bassó, de 6.800 m2 de superficie y símbolo del racionalismo catalán. Protegido como Bien Cultural de Interés Local (BCIL), y con expediente abierto para declararlo de Interés Nacional (BCIN), recientemente ha sido adquirido por el Ayuntamiento de Barcelona para hacer el nuevo Centro de Cultura y Educación de Barcelona, un equipamiento público que tiene que ser de referencia. Los jueves 14 y 28 de julio se llevarán a cabo visitas guiadas al edificio, dos cada día, a las 19 y a las 20 h. Para asistir es necesaria inscripción previa. Quien acuda podrá descubrir los espacios de esta construcción que se ha mantenido intacta, tanto por dentro como por fuera, desde que se inauguró, en 1960, hasta hoy, así como su historia y también el proyecto del Centro de Cultura y Educación de Barcelona.
Un año después de su inauguración, en 1961, la obra de Gili y Bassó ya fue distinguida con el Premio FAD de Arquitectura. En el edificio se contraponen los volúmenes geométricos y rectilíneos en el exterior con las formas curvas del interior. Se divide en tres secciones dispuestas en torno a una rotonda central que servía para facilitar la entrada y salida de los vehículos a los almacenes de la editorial. Las tres secciones se vinculan con patios exteriores ajardinados, creados para mantener la idea inicial del Pla Cerdà de llenar de verde los interiores de las manzanas. Las características de este espacio permitirán que se convierta en polo de dinamización y reflexión sobre la cultura y la educación, con una programación periódica de actividades. La nueva sede acogerá el Instituto de Cultura de Barcelona y del Instituto Municipal de Educación, y ya actualmente hay espacios que se han alquilado para usos temporales, como la sede de la Fundació Manifesta en Barcelona o la Oficina de Acceso a la Formación Profesional.
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