La importancia de las vidas anónimas, según Tàpies y Niño de Elche
El cantaor protagoniza una acción con la colaboración del artista visual y cineasta Lois Patiño.
Niño de Elche (en la imagen. Foto: Daniel Mordzinski), uno de los artistas más inclasificables, interesantes e imprevisibles de la escena flamenca, asume una nueva propuesta de vanguardia al protagonizar, en la Sala de Reflexión de la Universitat Pompeu Fabra, una serie de acciones artísticas que se inspiran en un texto de Antoni Tàpies. Como colaborador necesario de la experiencia, el cineasta y artista Lois Patiño. Cita el viernes, 13 de diciembre.
La propuesta forma parte del ciclo Las sillas de Tàpies, en el cual el Museo Tàpies invita a una serie de artistas, especialmente a los más vanguardistas e innovadores, a proponer una actuación relacionada, en principio, con alguno de los elementos que, como las sillas, eran presencias habituales en las obras del artista.
Habitualmente estas actuaciones o acciones se organizan en el mismo Museo Tàpies, pero esta vez la actividad se traslada a la Sala de Reflexión del Campus de la Ciutadella de la Universitat Pompeu Fabra. Es un espacio de quinientos metros cuadrados, situado en una cripta iluminada por ventanales, que fue diseñado por el mismo Tàpies. Él llenó el aposento con obras suyas elegidas expresamente para crear una atmósfera que invitara a la reflexión y al recogimiento interior. Aquí puedes ver el Díptico de la campana y la escultura Serpiente y plato. También verás sillas por la sala, dispuestas por Tàpies en uno de los muros, en los esgrafiados y en el diseño de la puerta de acceso.
En este espacio tan marcado por la estética y el carácter del artista, Niño de Elche y Lois Patiño se enfrentan a un fragmento de la Memoria personal de Tàpies y, concretamente, a un párrafo que habla sobre una muchedumbre de vidas grises "que no salen nunca en los periódicos ni en las revistas, pero sin las cuales no funcionaría nada", tal como escribía el creador desaparecido, que iba en busca de "la poesía y la verdad de las cosas pequeñas, inocentes, cotidianas, incluso monótonas".
Con estas palabras en la mente, Niño de Elche, o Francisco Contreras, si le quieres llamar por su nombre real, protagoniza la acción 3+2+1 formas de servicio anónimo. Aquí, el cantaor conecta con su biografía familiar y con un abuelo que trabajó como fabricante de sillas durante un periodo de su vida. Las acciones de Niño de Elche utilizan simbologías como la de un número seis que para él representa la generosidad, la responsabilidad, el amor hacia los demás, la compasión, la familia y el hogar.
Si quieres ver en acción a uno de los artistas más renovadores del flamenco, no te pierdas las acciones de Niño de Elche y las creaciones audiovisuales de Lois Patiño en la Sala de Reflexión de la UPF. Antes de venir, sin embargo, consulta en la web del Museo Tàpies toda la información sobre la actividad.