Una estrella de Navidad de grandes dimensiones y con veinte puntas iluminará este año por igual los edificios del Ayuntamiento y de la Generalitat situados a ambos lados de la plaza de Sant Jaume, en busca de una decoración navideña armónica y unificada que se extenderá, también a las fachadas de ambas instituciones. La puedes ver desde el 29 de noviembre hasta al 5 de enero.

Será el aspecto más visible de la decoración de Navidad en la plaza, donde este año también se podrá ver, por vez primera fuera del recinto que lo acogía habitualmente, el pesebre tradicional que, hasta ahora, la Associació de Pessebristesinstalaba cada año en el Museo Marès y que en esta ocasión, puedes visitar en el patio de Carruajes del edificio del Ayuntamiento.

Todas las miradas de quienes paseen por la plaza, sin embargo, se dirigirán a la gran estrella de Navidad. Y no será extraño, porque la figura no es precisamente pequeña. Tiene una estructura de hierro, metacrilato y luces LED. Y, en total, tiene un peso de dos toneladas y media y nueve metros de diámetro. Cada una de las veinte puntas de la estrella tiene una longitud de cerca de cuatro metros.

Presta atención, sin embargo, porque esta gran estrella, que es obra del arquitecto y artista Xevi Bayona y del creador digital Àlex Posada, tiene incluso un título: Origen. Alude al instante en que fue creado el universo, a esa explosión inimaginable que dio origen a toda la energía y la materia del universo en el cual vivimos.

Ya verás que la estrella tendrá el aspecto de una gran escultura durante el día, pero que por las noches se transforma en un faro que proyecta su luz sobre Ayuntamiento y Generalitat. Es un símbolo del equilibrio y la armonía propios de la naturaleza y, a la vez, un homenaje a la geometría cósmica y a los ciclos naturales. Cada una de las veinte puntas señala una dirección, un camino diferente hacia el infinito y evoca, por tanto, la magnitud del universo y la sencillez de un elemento tan humilde como la misma luz.

Cuando se haga oscuro, empezará en la plaza un espectáculo audiovisual inmersivo alrededor de la estrella que tendrá una banda sonora original propia y que permitirá interactuar con la instalación, empleando una aplicación de móvily escaneando un código QR. Trae unos auriculares, pues el sonido, como os hemos explicado, tiene un papel imprescindible en esta la experiencia navideña. Habrá espectáculo cada día, de 18.30 a 22 h, en sesiones cada treinta minutos y con una duración de cinco minutos.

Será una de las pocas ocasiones en que Ayuntamiento y Generalitat acuerden una decoración común, que se extenderá también a los elementos vegetales de los balcones de ambas instituciones.

El pesebre es tradición

Pero, pese a la modernidad de la propuesta de Xevi Bayona y Àlex Posada, las propuestas navideñas de la plaza de Sant Jaume incluyen igualmente elementos tradicionales. Se encarga de ello este año la Associació de Pessebristes que se han inspirado en el ambiente marino para recordar no solo la reciente Copa América, sino también el centenario del poeta Joan Salvat-Papasseit, que trabajó en el Moll de la Fusta y hablaba sobre él en algunos de los versos que escribió. El pesebre mide ocho metros de anchura por cuatro metros de fondo, tiene una altura de 70 centímetros y se podrá visitar del 29 de noviembre hasta el 5 de enero del 2025 (salvo el 25 de diciembre y el 1 de enero) de lunes a viernes de 11 h a 19 h y, los sábados, domingos y festivos, de 11 h a 20 h.

Finalmente, recuerda que, el sábado 14 y el domingo 15 de diciembre, de 12 a 20 h, puedes visitar también el edificio del Palau de la Generalitat, que organiza dos jornadas de puertas abiertas. Además, del 16 al 20 de diciembre, en el Pati Gòtic del Palau, podrás ver (de 17 a 21 h) un Tió de Navidad para los niños y niñas, un pesebre de la Associació de Pessebristes de Barcelona y una serie de abetos de Navidad.