Uno de los iconos más celebrados y resistentes del belcantismo
Una mujer joven está a punto de casarse con su amor. Justo en el mismo momento, es descubierta por todo el pueblo durmiendo en casa de un desconocido. Las sospechas de infidelidad, que todo el mundo da por ciertas, hacen que el joven prometido, loco de celos, rompa su compromiso y necesitará dos actos para averiguar que el sonambulismo es el auténtico culpable del lío. Todo termina felizmente: la presencia de la chica saliendo por la ventana del molino arriesgando su vida constituye la prueba definitiva de su inocencia.