La transformación del paseo de la Mar Bella permitirá dignificar el último tramo de litoral barcelonés que queda pendiente de rehabilitar y unir los barrios con el eje Besòs.

La actuación empezará con el tramo central, que incluirá:

• Un paseo de como mínimo 12 metros de ancho para peatones.
• Un carril bici de cuatro metros de ancho.
• La plantación de 15.000 metros cuadrados de verde, con un millar de árboles, parterres y arbustos.
• Espacios de ocio, juegos infantiles y zonas deportivas en el paseo, separados de la playa, para mejorar su organización y evitar la saturación.
• Cuatro zonas de bajadas con rampas y gradas accesibles.

Se prevé que las obras del tramo central empiecen a lo largo del 2024. Paralelamente, continúan los trabajos para redactar los proyectos ejecutivos de los otros dos ámbitos: el del campo de fútbol municipal y el de la plataforma marina. En total, se invertirán en todo el trazado más de 44 millones de euros.