Música, teatro, cine: estas disciplinas se han cruzado más de una vez a lo largo de la carrera de esta cantante catalana. Y vuelven a hacerlo en una celebración de la interdisciplinariedad dirigida por un dramaturgo y director argentino.
Sílvia Pérez Cruz se pasó la niñez entre el domicilio familiar y la escuela de arte de su madre. En más de una ocasión, la vio tocando la guitarra mientras sus jóvenes alumnos dibujaban, o pidiendo a los niños que pintaran con chocolate los sonidos que ella interpretaba con un saxo. Habiendo conocido desde tan joven la hibridación entre los lenguajes artísticos, no resulta extraño que la artista haya llevado su música a espectáculos teatrales y de danza, que haya interpretado temas para películas de ficción y documentales, y que haya utilizado la poesía como materia prima para sus composiciones. Buenos ejemplos de su incursión en las artes más variadas son películas como La noche de 12 años, del director Álvaro Brechner; el espectáculo Grito pelao, con la bailaora Rocío Molina (Grec 2018), o las composiciones que creó para el montaje teatral Cyrano, que protagonizó Lluís Homar. Partiendo de estas y otras experiencias con géneros artísticos diversos, esta primavera Sílvia Pérez Cruz ha editado Farsa (género imposible), el disco que ahora llega al escenario del Teatre Grec. Toma como título una palabra, farsa, que viene del francés farce (‘relleno’), y que hacía referencia a las breves comedias que los cómicos interpretaban entre acto y acto durante las representaciones teatrales en la corte de Luis XVI. Hoy, farsa tiene el significado de ‘falsedad’; de ahí que Pérez Cruz emplee esta palabra para referirse a esa dualidad entre lo que somos y lo que mostramos, entre la riqueza aparente y el vacío real, tan propia de nuestros tiempos.
El disco llega a escena convertido en un espectáculo, con un equipo creativo formado por la bailarina Elena Córdoba; el dramaturgo, actor y poeta Pablo Messiez; el pintor, iluminador y poeta Carlos Marquerie; el ingeniero de sonido y creador de espacios sonoros Juan Casanovas, o la diseñadora de vestuario Cecilia Molano, entre otros. Se trata, en definitiva, de una diversidad de talentos que promete convertir el escenario en toda una fiesta de la hibridación y la multidisciplinariedad.
Una producción de El Pez Cruz.
En coproducción con Grec 2020 Festival de Barcelona, Temporada Alta y Naves del Español en Matadero.
Idea original: Sílvia Pérez Cruz Dirección de la dramaturgia y las conexiones: Pablo Messiez Iluminación: Carlos Marquerie Supervisión del gesto y el movimiento: Elena Córdoba Vestuario: Cecilia Molano Diseño del sonido e ingeniería de sonido: Juan Casanovas Dirección de producción: David Benito Construcción de la escenografía: Taller de Escenografía Castells
Coordinación de la producción: Albert Sorribes Técnico de sonido: Juan Casanovas Técnico de vídeo: David Benito Maquinaria: David Benito Producción en gira: Álex Sánchez, Albert Sorribes Distribución en España: Alex Graneri (En Gira)
Fotografía: César Lucadamo, Clara Belles