Drama, humor y ternura se combinan en el texto del reconocido dramaturgo catalán, que nos habla sobre la niñez a partir de un encuentro aparentemente casual. Dirige la función uno de los fundadores del Teatro Timbre 4 de Buenos Aires.
Uno de los trabajadores del área de seguridad de un equipamiento comercial ha acompañado a una mujer mayor hasta una de las habitaciones a las que se conduce a aquellas personas que se sospecha que han robado algún producto. Una vez en el interior de esa habitación blanca y anodina, desprovista de personalidad y decoración, la mujer se niega a abrir su bolso. Lo que inicialmente parece un anecdótico pulso de fuerza acabará derivando en una situación inesperada cuando ella reconoce al joven como un alumno a quien enseñó a leer y escribir cuando era niño. Pocos días después, se producirá el reencuentro entre el trabajador de seguridad y dos otros exalumnos de esa mujer, con los cuales ella también se había encontrado de manera aparentemente casual. Ahora, son tres adultos con realidades y circunstancias que nada tienen que ver entre sí, pero con un mismo nexo en común: cuando eran niños, todos compartieron la misma profesora que ahora ha reaparecido en sus vidas. La coincidencia abrirá algunos interrogantes: ¿el encuentro entre la exprofesora y sus alumnos fue fruto de la casualidad o no? Y, si no lo fue, ¿por qué los escogió a ellos y con qué finalidad los buscó? ¿Quiénes eran aquellos niños y aquella profesora? Y, sobre todo, ¿en qué tipo de personas adultas se han convertido? La obra, estructurada en un sistema de relatos y situaciones cruzadas, funciona como un rompecabezas en el cual iremos descubriendo los encuentros de Irene, la profesora, con cada uno de ellos, y conociendo sus realidades y situaciones presentes, pero también rememoraremos un tiempo pasado compartido, un espacio de aprendizaje en el que sus vidas como niños eran todavía una hoja en blanco.
La habitación blanca es el nuevo texto de Josep Maria Miró, autor de obras como Temps salvatge (Premio Max 2019 a la mejor autoría teatral), Cúbit, Nerium Park, Fum, El principi d’Arquimedes o Gang Bang, o de dramaturgias y adaptaciones como L’amic retrobat y Neus Català, un cel de plom. En esta ocasión, Miró escribe una obra íntima que combina drama, humor, ternura y reflexión. El texto recoge la idea de Sartre de que “la infancia decide” y pone la lupa en esa habitación en blanco y espacio fundacional que es la niñez.
Una coproducción de Grec 2020 Festival de Barcelona y la Sala Flyhard.
Con la colaboración de Teatro Timbre 4.
Con el apoyo del Instituto de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, el Instituto Catalán de las Empresas Culturales y el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
Autoría: Josep Maria Miró i Coromina Dirección: Lautaro Perotti Ayudantía de dirección: Concha Milla Reparto: Francesca Piñon, Albert Prat, Paula Blanco, Marc Rodríguez Diseño de escenografía y vestuario: Albert Pascual Diseño de la iluminación: Xavi Gardés Imagen: Roser Blanch Producción ejecutiva: Clara Cols, Sergio Matamala Comunicación y redes: Eli Riera Fotografía: Roser Blanch
