Son viejos amigos del Barcelona Districte Cultural. Les conocimos gracias a Amigoo y ahora vuelven con Petits prínceps, un espectáculo que se dirige más directamente a los niños pero que, como todos los de Mumusic Circus, bebe de la ternura y hace de la sencillez, poesía.

-¿Quiénes son los pequeños prínicipes? ¿Y cuá´les son sus reinos?
-Los pequeños príncipes son los niños de todo el mundo. Y su reino es el espíritu de la pureza, su inocencia y su receptividad incondicional innata.

-¿Qué lenguajes utilizáis en este espectáculo?
-Música, circo, danza y el juego del actor que interactúa con el público.

-¿Cómo fue el proceso de creación?
-Teníamos una compilación de canciones propias y decidimos ponerlas en escena en el marco de un contexto pluridisciplinar. Las canciones son el hilo conductor de la obra. Y la intención de la obra es destapar y rendir homenaje al niño interior universal que existe dentro del alma de todo ser humano, con sus valores y su sensibilidad.

-Y ¿cómo es vuestra estética?
-La estética de la obra parece de un principio minimalista, para dar valor a la belleza de aquello que es sencillo y esencial.

-¿Qué diferencias y similitudes tiene con Amigoo, que ya presentasteis en el Barcelona Districte ?
-Petits prínceps está narrado con un lenguaje infantil; en cambio, Amigoo lo hace con un lenguaje universal, para todas las edades y todo tipo de público. La similitud entre ellos es que ambos están creados a partir de nuestra esencia, sin personajes premeditados, abriendo y mostrando emociones y partes nuestras reales, sin interpretar ningún carácter ajeno a aquello que nosotros ya somos. Las emociones y la música son el motor en ambos casos.

-¿Hay una evolución de vuestro lenguaje? ¿Hacia dónde creéis que camina?
-El público nos dice que Mumusic Circus tiene un espíritu peculiar que define claramente un estilo muy personal, pero nosotros no acabamos de ser conscientes ni capaces de definir esta esencia. Nosotros creamos sin pensar y el estilo sale solo... Justo ahora, con los años, empezamos a identificarlo un poco desde dentro... Todos nuestros trabajos parten de nuestras emociones y conforman un lenguaje muy simple y comunicativo.