El binomio educación y cultura como una línea estratégica del Pla de Barris. Este es el aspecto que destaca Sergi Díaz, de la Direcció de ciutat Educadora i Cultura als Barris -que pivota entre el Institut de Cultura de Barcelona (ICUB) y el Institut Municipal d’Educació (IMEB), de la acción llevada a cabo en diferentes escuelas de la ciudad para convertirlas en equipamientos culturales; entre ellas tres que pertenecen al circuito Barcelona Districte Culturales: las salas La Pau (en el Besòs), la Carlos Diaz (en la Verneda) y la Maremar, en el barrio de La Marina.

El embrión de esta idea es el modelo de gestión del Auditori Sant Martí, un espacio compartido y gestionado entre dos institutos y el Centre Cívic Sant Martí. Un trabajo que requiere de un alto grado de coordinación entre distrito, las áreas de Cultura, Educación y Pla de barrios y la implicación directa de los equipamientos culturales de proximidad del territorio. Estos hace falta que contemplen la gestión de la sala conjuntamente con la escuela dentro del proyecto de dinamización cultural y comunitaria de su entorno.

La puesta en marcha de este proyecto transversal de proximidad se ha priorizado en barrios con poca oferta cultural, donde se quieren hacer llegar programaciones de espectáculos de calidad de pequeño formato. Sergi Diaz subraya que se trata “no tanto de una operación de gestión de un espacio, sino de un proyecto conjunto que soluciona varias carencias y ofrece nuevas oportunidades: carencia de un espacio cultural, adecuación y mejora de un equipamiento para usos educativos e implicación de la comunidad educativa. De este modo, se consiguen varios hitos y varios usos con una inversión relativamente pequeña”.