“Tradición y vanguardia conviven de forma naturall’
Un vaso que él vacía para volverlo a llenar. Un vaso que es y será flamenco pero que ha aprendido de nuevos códigos, de otros lenguajes que, desde fuera, lo van influyendo y cambiando, modificando y esculpiendo. Es un Movimiento colateral que está escribiendo una nueva manera de entender el baile flamenco. Y Jose Manuel Álvarez, junto con su compañía, es el gran maestro de ceremonias.
- ¿Cómo es el baile flamenco de Movimiento Colateral?
Me planteo lo baile flamenco como un vaso que necesito vaciar para llenarlo de nuevo, porque lo flamenco se mueve con unos códigos muy concretos pero esto no impide que tradición y vanguardia convivan de forma natural. Es un baile fluido, que parte en parte de la improvisación grupal, y que trabajamos desde un movimiento orgánico.
-Decís que buscáis una apertura a nuevos códigos y al diálogo entre la danza española y la improvisación, ¿nos lo explicas?
Trabajamos siempre desde la perspectiva del baile flamenco pero no nos ceñimos estrictamente a estructuras tradicionales sino que nos permitimos posarlo en relación con formas de improvisación más abiertas a la danza, y una de ellas es inevitablemente la danza española. lo flamenco se trabaja a menudo la improvisación rítmica pero quizás no se posa tanto el acento al explorar el cuerpo o la relación con los otros intérpretes. El hecho que el proceso creativo haya estado grupal, nos ha permitido nutrirnos a los unos de los otros en cuanto a propuestas de movimiento.
- ¿Cómo empezaste a trabajar en el espectáculo y por qué tres mujeres y tú sobre el escenario? ¿Cómo haces convivir los roles femeninos y masculinos de la danza sobre el escenario?
Bien es verdad que fue una decisión intuitiva! Las tres tienen una buena formación académica pero a la vegada una personalidad al escenario que me cautivó. En ningún momento me planteé el género sino explorar el movimiento de cada cual, y si de alguna manera a escala de concepto se ha tenido en cuenta, es para jugar en total igualdad de condiciones y no echar de tópicos en lo flamenco.
-Te vimos bailar con Los Aurora, ¿se asemeja lo que haces con ellos y tu coreografía?
Por mí son conceptos totalmente diferentes, aunque son proyectos que conviven en paralelo. Con Los Aurora me considero un miembro más de la banda. La composición musical ya estaba hecha cuando me incorporé y yo soy un músico más aportante ritmo y movimiento. En el caso de Movimiento Colateral he hecho un trabajo de dirección y coreografía.
-¿Qué músicas has utilizado?
Tenemos una composición preciosa que se llama Noche en vela de Max Villavecchia (que por cierto, es el pianista de Los Aurora) pero adaptada a la coreografía y dos más que creó él expresamente por el espectáculo. También tenemos momentos únicamente con la percusión del zapateao, y una versión de una milonga que canta Ana Brenes.
-Esta coreografía evolucionó hasta un espectáculo más grande... ¿Fue un proceso natural? ¿Cómo fuiste creando las piezas y haciéndolo crecer?
Empezamos encontrándonos en el estudio con las bailarinas haciendo improvisaciones y sacando material nuevo que cerramos en una primera etapa con una pieza de 20 minutos que funciona para espacios no convencionales. Entonces vi claro que había llegado el momento de apostar por un formato más grande y me rodeé de todo el equipo que hizo posible la creación de Bailes Colaterales, de músicos a equipo creativo y técnico. Esto nos ha permitido plantearnos todo ello como el proyecto Colaterales, donde en función del espacio y las posibilidades, llegamos con un formato u otro.
-¿Te gustaría continuar tu trabajo como coreógrafo? Crees que es todavía más difícil para los coreógrafos de flamenco que para los de danza contemporánea?
En estos momentos el que más me interesa es hacerme como coreógrafo. Desde ¡La Capitana!, espacio de formación que dirijo, estamos trabajando en talleres de creación para explorar nuevas posibilidades coreográficas aparte de las tradicionales (y las que permiten sobrevivir en lo flamenco). También me interesa trabajar con artistas otras disciplinas, desde cantantes a compositores o audiovisuales, que me enriquecen en cada proyecto. Y en paralelo ya estoy trabajando en un nuevo espectáculo.
Creo que mi generación estamos más predispuestos a explorar nuevos caminos. Si queremos salir de circuito flamenco y entrar también en el de la danza, tenemos mucho trabajo a hacer pero despacio se abren puertas. Creo mucho en un trabajo de creación de público. Lo flamenco siempre cautiva y una vez nos libramos de viejos hashtags y prejuicios, descubriremos su riqueza. Quizás en Cataluña, esto nos supone algo más de trabajo... pero estamos aquí para hacerla!