“Queremos conectar e interactuar con el público”
Con su primer Scrakeja’t triunfaron. Lo pasearon durante años y años. Y consiguieron el aplauso de un público que se sentía parte del espectáculo, que conectaba, quizás por primera vez, con el universo de la danza. Así que hace unos meses, al celebrar 20 años de escenarios, la compañía CobosMika, o sea Olga Cobos y Peter Mika, lo han vuelto a montar, ahora como Scrakeja’t 2.0
¿Por qué decidisteis recuperar este espectáculo?
Con motivo de los veinte años de CobosMika Company y como tributo por todo el camino recorrido, queríamos revivir alguna de las piezas para establecer un vínculo temporal con esta celebración. Elegimos la pieza de nuestro repertorio que mejor representaba la conexión de la danza con todo tipo de públicos. Porque este es un año de celebración para nosotros y queremos celebrarlo con el público. Poder hacer danza que conecte con todo tipo de público. Durante las más de 80 representaciones del primer Scrakeja't (2007-2013) siempre sucedió este hecho festivo de interacción con la platea, del teatro como espacio donde suceden cosas y el público no es solo observador sino parte. Scrakeja't 2.0 es heredera de esta filosofía.
¿Por qué creéis que ha funcionado tan bien y que conecta tan bien con los adolescentes?
La combinación de danzas urbanas y danza contemporánea, la calidad del movimiento empleado, junto con una narrativa teatral en clave de comedia hace que el espectáculo conecte tanto con adolescentes como con niños y adultos.
¿Era esta vuestra intención cuando lo creasteis?
Sí. ScraKeja't 2.0, como su anteceso,r tenía este punto de partida de conexión e interacción con el público para comunicar con el movimiento.
¿Qué es escraquear?
Es una palabra inventada como recurso dramatúrgico para definir el movimiento, la idea es que cada cual tiene su lenguaje en el movimiento. Scraqueig, scraquejar y sus derivaciones también se usa como ritmo escénico. Scrakejar es mover el esqueleto con intención.
Y ¿por qué un combate de escraqueo?
Nos inspiramos en los combates de la danza urbana y lo transformamos en la ficción para convertirlo en una gran final por el cinturón que acredita como ganador del título Mundial Absoluto de Scrakeo. Organizamos un ring de luchadores del movimiento donde el público asistente decidirá cuál de los finalistas es su escogido para ser campeón mundial.
¿Cómo creasteis los cuatro personajes que participan y cómo fuisteis definiendo su manera de bailar?
Teníamos la idea dramatúrgica de donde queríamos que sucediera el espectáculo: en la competición de una gran final, puesto que esto nos permitía introducir al público y activarlo, así no podía ser pasivo. Una vez definido dónde y qué, elegimos los tipos de personajes que participarían en la final. Los asociamos geográfica y culturalmente a un lugar del globo terráqueo y de aquí extrajimos el lenguaje particular de cada uno de ellos.
Hay danzas urbanas y también ecos de Oriente... ¿es un viaje por diferentes lenguajes?
Sí. El hecho de que los personajes estén ligados a una cultura hace que cada cual utilice un tipo de movimiento que le liga con su origen.
¿Cómo los habéis cosido?
Dando especial relevancia a la fusión entre movimiento e interpretación.
¿Creéis que son necesarios espectáculos a través de los que los jóvenes puedan familiarizarse con el lenguaje de la danza?
¡Importantísimo! Muchos espectadores, y los jóvenes particularmente, acostumbran a ver la danza contemporánea con cierto recelo. Hemos apostado por conseguir que quién se acerca por primera vez a ver danza, se encuentre con un espectáculo luminoso y estético, donde el movimiento es un lenguaje que transmite información y que te implica en la acción. Es una buena manera de enganchar a los jóvenes a las artes escénicas en general y a la danza en particular.