Universitat, Empresa i Societat
¿La universidad responde a las expectativas y necesidades de las empresas?
¿Las empresas incorporan los conocimientos universitarios?
¿La sociedad civil organizada participa en el seno de la universidad?
Las respuestas a estas preguntas nos ponen ante la necesidad de redefinir el modelo de relaciones existente entre la universidad, las empresas y la sociedad, a fin de impulsar un modelo socioeconómico basado en la investigación y la innovación capaz de hacer frente a los retos de los nuevos tiempo que estamos viviendo.
El desarrollo y consolidación de la llamada sociedad del conocimiento requiere una sociedad que asuma la creatividad y la innovación como elementos que impregnen el conjunto del tejido social.
La creatividad es la puerta que abre y potencia los procesos de investigación e innovación, asumiendo que la formación es un continuo a lo largo de la vida de las personas y una condición necesaria e imprescindible para el progreso y competitividad económica.
La universidad debe abrirse a las empresas y las empresas deben acercarse a las aulas. Se deben establecer nuevos mecanismos que favorecen el mutuo conocimiento y, al mismo tiempo, impulsar la colaboración directa entre el mundo del trabajo y el universitario.
De igual modo, resulta imprescindible que la sociedad civil organizada participe activamente en la transmisión de las demandas sociales, en la definición del modelo universitario que necesitamos, en la búsqueda de recursos y en el retorno a la sociedad del conocimiento producido.