Nueva etapa de ‘Barcelona Metròpolis’
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Una vida más larga, cambios sociales y económicos que rompen el tejido social y una cultura más individualista son la semilla de un nuevo fenómeno: la soledad en medio de la multitud. Hay que velar por fortalecer y preservar el tejido social, la malla de recursos y relaciones personales y sociales que hacen que las personas reciban calor y protección de la comunidad y puedan compartir con los demás su valor.
El Alba es el laboratorio de luz de sincrotrón más importante del Mediterráneo y del suroeste de Europa, pese a lo cual es un gran desconocido de la sociedad barcelonesa en general.
La comunicación electrónica ha aumentado enormemente la capacidad de interacción con los demás. Pero hay un elemento que marca radicalmente el tipo de relaciones que podemos establecer en el espacio virtual: la ausencia física. Faltan la posibilidad de empatía y todo el conocimiento social y personal que nos transmite el cuerpo.
A Olalla le gusta pasear por los lugares de Atenas donde se forjaron conceptos como ciudadanía o participación para recordarnos cómo podría ser y no es nuestra gastada democracia. El helenista volvió a Barcelona en mayo para presentar su último trabajo, una reflexión sobre la senectud y la sociedad que envejece.
La okupación del cine Princesa, en octubre de 1996, fue la primera actuación destacada que cuestionaba el modelo Barcelona. La filósofa y activista Marina Garcés traza en su último libro la historia de la amalgama de movimientos que plantearon una crítica radical al modelo y al relato histórico que lo justificaba.
La cooperativa se creó a finales del franquismo para defender a los trabajadores. Hoy tiene siete despachos y más de ochenta socios en la defensa de la parte débil de la relación jurídica, ya sean víctimas del amianto o de abusos bancarios. Sus cruzadas judiciales se dirigen contra las nuevas exclusiones, la creciente precariedad laboral y el retroceso de los derechos y las libertades.
Las primeras iniciativas para situar quioscos en el espacio público barcelonés, para la venta de productos o para cobijar actuaciones musicales, datan de mediados del siglo XIX. Aunque el mérito de la osadía de instalar el primer quiosco de prensa se lo apuntó un diario de tarde nacido en 1888: El Noticiero Universal. Desde La Rambla, los quioscos de prensa se extendieron por toda Barcelona.
Los vendedores de prensa escrita viven años difíciles. En una década han cerrado el 35 % de los quioscos de Barcelona. La crisis y, sobre todo, los nuevos hábitos a la hora de informarse llevan a muchos a bajar la persiana. El sector y la Administración, conscientes del problema, abordan una reconversión necesaria.
Cerca de cincuenta jardines interiores de manzana están abiertos al público en el Eixample. En cada interior de manzana hallamos este reducido microcosmos, con sus particularidades y singularidades. Pero todos tienen en común los espacios de ocio y recreo, la imitación que hacen de la naturaleza y el aislamiento perceptivo, que facilita la interrelación del vecindario.
El Mayo francés cumple medio siglo. La revuelta desató en Cataluña una carrera frenética para demostrar quién era más izquierdista y para relevar al PCE-PSUC como partido revolucionario de la clase obrera. El discurso de la contracultura, por su parte, añadió a la lucha política una dimensión cultural y subjetiva: se sostenía que la revolución debía comenzar por uno mismo.
Tres libros inauguran la colección “Biblioteca Secreta”, tres volúmenes que recuperan personajes necesarios de la Barcelona más underground. Pep Gómez escribe sobre Pepe Otal, Joan Vinuesa narra su viaje a la India y Xavi Cot explica qué fue el Cuc Sonat.
El libro que Vázquez Montalbán publicó en 1987 y que ahora tenemos reeditado en castellano y traducido al catalán y al inglés, sería el libro ideal, puesto que se puede leer y a la vez recorrer como si se tratara de una ciudad.