La última ópera de Mozart
El Palau de la Música ofrece la popular ópera La flauta mágica, de W. A. Mozart, la última que escribió este gran compositor.
Una de las obras más queridas de la ópera recibe una nueva puesta en escena en el Palau de la Música. Mucho se ha hablado de esta pieza, considerada un cuento de hadas, pero también una metáfora de la masonería e incluso se la ha analizado en su contexto histórico y político, la década de 1780. Sin duda es todo esto y más. Estrenada en 1791, Die Zauberflote es puro entretenimiento, y supuso un éxito inmediato en todo los estratos sociales de la época.
El público del Theatre auf der Weiden de Viena pudo disfrutar antes que nadie de esta ópera con música de Wolfgang Amadeus Mozart y libreto en alemán de Emanuel Schikaneder. La obra es una defensa de los valores del coraje, la virtud y la sabiduría.
En dos actos, tiene forma de un singspiel, un tipo de ópera popular cantada en alemán, en el que se intercalan partes habladas. Una tierra mítica entre el sol y la luna. El príncipe Tamino huye de una terrible serpiente antes de que tres damas al servicio de la Reina de la Noche lo salven. Le dan al príncipe un retrato de la hija de la Reina, Pamina, quien dicen que está prisionera del malvado Sarastro. Tamino se enamora a primera vista del retrato de la joven. Para rescatarla, las damas le ofrecen una flauta mágica para garantizar su seguridad en el viaje, y a Papageno - un cazador de pájaros-, que lo acompañará, le entregan cascabeles mágicos de plata.
Estrenada apenas dos meses antes de la muerte prematura del compositor, vivió lo suficiente para disfrutar de su éxito, y sigue siendo un elemento básico en el repertorio de las principales salas de conciertos. La popularidad de la que fue, por tanto, su última obra se reflejó en dos secuelas inmediatas de Peter Winter y Johann Wolfgang von Goethe.
Mozart fue muy prolífico, y compuso una obra variada que abarcó géneros tan distintos como la ópera bufa, la música sacra y las sinfonías. Su relación con la ciudad de Viena fue complicada y su estilo de vida también, pasando de periodos de abundancia a otros en los que apenas obtenía ingresos y estaba cargado de deudas. En 1790 se estrenó en la capital austriaca su ópera Così fan tutte y al año siguiente la propia La flauta mágica. Las dos fueron muy bien recibidas por el público y la crítica, y la ciudad, que había sido muy dura ante el fracaso de alguna de sus obras, le valoró de nuevo antes de su muerte.
Con música a cargo de la Orquestra NovAria Filharmonia, cuenta con la interpretación de los cantantes Sarah Zhai (Pamina); Carlos Enrique Ortiz (Tamino); Joan G. Gomà (Papageno); Romina Krieger (Papagena) y Danil Sayfullin, Sarastro
Las entradas para esta función están disponibles desde este enlace.