Comicidad y poesía de pequeño formato con Guillem Albà
El artista lleva a los centros cívicos de la ciudad el espectáculo Ma solitud como parte de la programación de Barcelona Districte Cultural.
Humano, sencillo y compartido. Así es el talento que aplica Guillem Albà a sus propuestas escénicas y, especialmente, a Ma solitud, una de las últimas que ha creado y con la cual regresa a su universo visual más característico. Las manos, humildes y simples, son las protagonistas de una fiesta escénica que te hará reír y te conmoverá. Todo empieza el 16 de noviembre en el Centro Cívico Zona Nord (hay siempre dos pases del espectáculo) pero continuará hasta el 20 de diciembre en otros espacios culturales barceloneses.
El espectáculo forma parte de Barcelona Districte Cultural, un programa del Institut de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona que lleva a los centros cívicos y otros espacios culturales y escenarios barceloneses creaciones nacidas en la ciudad que han hecho fortuna en los escenarios y ahora viven una segunda vida con entrada gratuita. Solo hay que hacer la reserva y asistir a la función elegida.
Esta vez verás en el escenario a Guillem Albà, un creador escénico que combina en sus montajes el teatro visual, el clown, los títeres, la música o el teatro de gesto. Ha trabajado con Jango Edwards entre otros, y se formó con uno de los famosos I Colombaioni, pero ya hace diecisiete años que tiene trayectoria propia y ha firmado espectáculos que van desde el primero, Sketchofrenia (2007) hasta Tota aquesta por que ara tinc (2023) que se estrenó durante la última edición del Grec.
En los centros cívicos barceloneses lo verás con Ma solitude, una pequeña maravilla que ya ha viajado por doce países y ha recibido los premios a la Mejor pieza de pequeño formato en Feten 2023, Mejor interpretación en la Fira de Titelles de Lleida 2023 y Mejor pieza teatral en la Feria de Teatro Ibérico Fundao 2023, en Portugal. No es extraño, pues este espectáculo se basa en lo que es esencial y, en tiempos de sobreinformación, no reivindica el teclado, sino los dedos y las manos que lo hacen funcionar y que, sí, también pueden convertirse en elementos creativos e incluso en coprotagonistas de un espectáculo.
Lo verás en este montaje, un viaje de la comedia a la poesía, en el cual manos y títeres nos recuerdan la importancia de la sencillez y de esas características humanas que todos y todas compartimos.
Si quieres ver qué es capaz de hacer Guillem Albà con sus manos y algo más, ven a ver Ma solitude, pero antes consulta en la web de Barcelona Districte Cultural la información sobre las diferentes funciones.