Las Migras de Abya Yala, protagonistas de FemArt
El colectivo de mujeres latinoamericanas expone en Ca La Dona obras reivindicativas y de empoderamiento feminista.
FemArt es un colectivo de activistas feministas con sede en Ca La Dona que entiende el arte como espacio de encuentro y estímulo para generar pensamientos disidentes, y como instrumento de utilidad crítica y didáctica para incidir en el cambio social mediante la reformulación de la imaginaria colectiva a partir de creaciones visuales y plásticas alternativas, liberadoras y antipatriarcales.
Desde 1992, FemArt convoca una muestra abierta a mujeres, lesbianas y trans en torno a un tema que tiene que ver con las inquietudes sociales y del feminismo radical. Hasta el 24 de marzo, se puede visitar la exposición Travesías entre ensoñaciones y tempestades, de Las Migras de Abya Yala. En la pasada edición del certamen cautivaron al jurado y al público de FemArt con el proyecto En resistencia, reivindicando la capucha como aliada y símbolo de la revolución feminista.
Abya Yala es el término con el que los indios kuna de Colombia y Panamá denominan al continente americano en su totalidad. Significa “tierra de riqueza” o “continente de la vida” y fue propuesto por el líder aimara Takir Mamani para que todos los pueblos originarios lo utilicen como forma de descolonización.
En el caso que nos ocupa, Las Migras de Abya Yala son “un colectivo dinámico de mujeres latinoamericanas articulado en 2020 para accionar, imaginar y crear en su conjunto” con el objetivo de “abrir nuevos espacios para las artes y los feminismos del Sur”. Sus integrantes recurren a diferentes disciplinas artísticas –como el medio audiovisual, la fotografía, el arte mural, el periodismo literario, la ilustración o el textil– para crear herramientas de guerrilla con las que combatir un modelo económico, de clase y género que las oprime y obliga a migrar. Su praxis se basa en tres principios: la colaboración como método, la transdisciplina como estrategia y la espontaneidad como atributo.
En Travesías entre ensoñaciones y tempestades, un total de 27 artistas demuestran que la migración puede erigirse en un campo creativo para experimentar, reinventar y reinterpretar la circunstancia y la memoria de sus protagonistas.