Un Grec con inauguración doble que nos habla sobre la colectividad
13/04/2023 - 12:15 h
Se abre la venta de localidades para la edición de este año del festival de Barcelona, con un centenar de propuestas programadas.
Dos inauguraciones, una oficial y otra popular, pero ambas igualmente espectaculares; grandes nombres de la escena internacional; grandes producciones con autores/as y directores/as locales y pequeñas joyas que dejan constancia de la creatividad barcelonesa; un montón de espectáculos que nos hablan de la colectividad y la conciencia de grupo… Un centenar de propuestas forman la programación del Grec 2023 Festival de Barcelona, una edición festiva y repleta de propuestas visuales especialmente estimulantes que, del 30 de junio al 31 de julio, vuelve a convertir la ciudad en un escaparate de las artes vivas de nuestro tiempo. A partir del 18 de abril, se abre la venta de localidades.
Solo te adelantamos unos cuantos nombres para que vayas haciendo boca: Carlota Subirós, que adapta un clásico de las letras catalanas; mitos de la escena como Declan Donnellan, Nick Ormerod, Robert Wilson, Ivo Van Hove o Lemi Ponifasio; monstruos de la danza que van de La Veronal a Sasha Waltz and Guests y la Orquesta Sinfónica del Liceu; fenómenos de la música como David Lang (con la Orquesta Sinfónica de Barcelona y Nacional de Cataluña y el Orfeó Català); la música de nuestro tiempo de Rufus Wainwright… Todo en una edición en que las propuestas visuales tienen un peso considerable: desde la poesía escénica de Dimitris Papaioannou y el circo de Yoann Bourgeois hasta la propuesta fascinante de Boris Gibé y la Cia Les Choses de Rien…
Todo empieza del 29 de junio al 1 de julio en el Teatre Grec, donde tendrá lugar la inauguración oficial del Grec con unos viejos conocidos del festival: Gravity and Other Myths, una de las compañías australianas de circo contemporáneo con mejor reputación, que vuelve al Grec (vinieron en el 2019) con The Pulse, en que combinan circo, voz humana y sentimiento de grupo y mezclan las acrobacias con las interpretaciones del coro de voces femeninas del Orfeó Català.
Espacios singulares
Con The Pulse se inaugurará el Grec Montjuïc, pero el Grec Ciudad, que reúne las propuestas del festival promovidas por el tejido escénico barcelonés, también tendrá una inauguración propia, una fiesta popular y gratuita (Les Traceurs) servida por Rachid Ouramdane y el equilibrista Nathan Paulin, que te hará sufrir un rato caminando por una cinta a gran altura sobre el paseo de Gràcia. Esta popular avenida será el primero de una serie de espacios singulares que salpican el Grec: desde el Dipòsit del Rei Martí (donde Aurora Bauzà y Pere Jou presentan A Begginning_expanded version) al Ateneo Barcelonés (donde Òpera de Butxaca lleva a escena Quatre solos soles), pasando por La Muriel (donde Sixto Paz pone en escena la impactante Bèsties), la Modelo (Jo, travesti, de Roberto G. Alonso), la Fundación Muñoz Ramonet (Una casa en la montaña, de Albert Boronat) o la Casa Museo Verdaguer, en Vil·la Joana, donde la compañía Pagans nos muestra El valor de res.
A partir de ahí, un delirio de propuestas y nuevas creaciones, empezando por la que lleva al Teatre Grec el homenaje danzado de Sasha Waltz and Guests y la Orquesta del Liceu a un grandísimo compositor en Beethoven 7. También dentro de la programación del Grec Montjuïc y con respecto a las propuestas de danza, encontrarás montajes imprescindibles en el Mercat de les Flors: desde el coreógrafo Damien Jalet (Vessel) hasta la catalana Aina Alegre (This Is Not “an act of love & resistance”), que se acaba de poner al frente del Centre Chorégraphique de Grenoble como codirectora, pasando por la propuesta más novedosa y joven de La Veronal (Firmamento), unas notas flamencas que van desde la innovadora Rocío Molina con el Niño de Elche (Carnación) hasta el flamenco de la británica Yinka Esi Graves (The disappearing act), las propuestas renovadoras del festival Desvarío de Nou Barris o el 25.º aniversario de IT Dansa (Celebració), o bien, en este en La Caldera, el 60.º aniversario en danza de una coreógrafa veterana: Montse Colomé (Celebration. Un ball parlat).
Recuerda que, también dentro de la programación de danza y en el Grec Ciudad, Sol Picó, Encarna Sánchez y Natsuki llenan El Born Centro de Cultura y Memoria con la versión site-specific de Titanas creada para el recinto y que, en el Recinto Modernista del Hospital de Sant Pau, tendrás a una coreógrafa internacional, Marina Mascarell, rompiendo fronteras entre el público y el Orfeó Català en el Rèquiem de la Llum.
Circo aéreo y… ¡acuático!
En esta edición del Grec, encontrarás un buen número de espectáculos de circo, entre ellos los dos que inauguran el festival (The Pulse y Les Traceurs), pero también otros grandes nombres del circo internacional, como Circus Ronaldo, que vuelven a Barcelona con Sono Io?, un espectáculo tan intergeneracional como el que nos presenta otro de los grandes nombres del circo local, el de Leandro Mendoza, con Vetus Venustas. También Moon Ribas y Quim Girón, dos referentes del circo contemporáneo catalán, presentan su propuesta Ramat Simfònic en la plaza de Margarida Xirgu (¿quién hablaba de grupos y colectividades?), igual que hace Joan Català con Idiòfona, en la Fundación Miró. No te pierdas tampoco el circo de Clara Poch Masià (Lady Panda) ni el circo acuático (sí, lo has leído bien) de María Palma Borràs en la Fundación Joan Brossa-Centre de les Arts Lilures.
No obstante, algunos montajes de circo (y también algunos de teatro) tienen un componente visual bastante marcado, como por ejemplo L’absolu. El espectáculo de Boris Gibé y la Cia Les Choses de Rien tiene lugar en un gran silo cilíndrico que se instalará en la plaza de Margarida Xirgu, y promete ser un recinto singular para un espectáculo igualmente singular que se parecerá poco a todo lo que has visto. También tiene un componente visual (y muy físico) la propuesta de movimiento continuo de Yoann Bourgeois en Celui qui tombe. Y si buscas poesía hecha imagen, no deberías perderte la delicadísima propuesta de Dimitris Papaioannou, Ink, en el Teatre Lliure, ni las escenas híbridas de la Agrupación Señor Serrano, que ha creado un espectáculo, Una illa, para hablarnos también de colectividad… con la ayuda de varias inteligencias artificiales. Ojos y oídos, finalmente, son los destinatarios de la trilogía literaria de cabosanroque (CCCB), formada por No em va fer Joan Brossa, Dimonis y, estreno de este año, Flors i viatges, basado en la obra de Mercè Rodoreda.
El teatro nos trae un menú escénico para gourmets, con algunos nombres de altura como los de Declan Donnellan y Nick Ormerod (Cheek by Jowl), que se adentran en el teatro del Siglo de Oro español con La vida es sueño, de Pedro Calderón de la Barca, en el Teatre Grec; el de Robert Wilson, que monta un Ubu mironiano en las salas del Museo Nacional de Arte de Cataluña (donde también encontraremos las creaciones vivas de Irene Vicente en Corpus); el de Ivo Van Hove, que vuelve a Barcelona presentando su versión de la novela corta de Édouard Louis Who Killed My Father; o el de Carlota Subirós, que desdobla en once a la Colometa para llevar al Teatre Grec su versión de La plaça del Diamant. ¿Conoces al libanés Rabih Mroué? Pues es uno de los nombres imprescindibles de la escena internacional, autor de Riding on a cloud, en que nos cuenta una historia real y ficticia a la vez. El creador será objeto durante el festival de una atención especial con actividades como un ciclo en la Filmoteca relacionado con sus creaciones.
Un festival musical y familiar
Propuestas familiares en la plaza de Xirgu que adoptan la forma de talleres (Dimecres petits), de representaciones teatrales o de circo (el mencionado Ramat Simfònic y HoHiHu, con los Farrés Brothers) o conciertos infantiles. Ve al Sant Andreu Teatre y encontrarás también propuestas de danza a cargo de Roseland Musical (Jo soc d’aquí) y una adaptación de una novela a cargo de Engruna Teatre (Dins el cor del món).
Los y las amantes de la experimentación y las escenas híbridas no se perderán ni el trabajo conjunto de la performer Sònia Gómez y Los Sara Fontán (Fem una bona pena abans de morir, en L’Auditori), ni las danzas urbanas de Les Mybalés hablando sobre el vacío (Le vide, dirigida por Esther Nadal) o el espectáculo de poesía y danza de Alberto Cortés One night at the golden bar (Fundación Joan Brossa-Centre de les Arts Lliures).
La música es otro apartado destacado del festival, que este año tiene en el programa a artistas tan codiciados como Rufus Wainwright, que vuelve a mirar hacia el folk en su nuevo disco, Folkocrazy; Sílvia Pérez Cruz, que tiene como cómplices a Liliana Herrero y Maria Gadú en Territorios; o Joan Dausà, que celebra diez años en el escenario con Jo Mai Mai. Gira 10 anys. Todo ocurre en el Teatre Grec, donde también tendremos a La Ludwig Band, Mayte Martin o un extraordinario encargo de L’Auditori que lleva al recinto la obra del compositor David Lang Prisoner of the State, que relee con la OBC y el Orfeó Català una ópera de Beethoven sin utilizar ni una nota del original.
No obstante, algunas piezas teatrales tienen un componente musical destacado, entre las cuales Per Evita. Una astracanada musical, de Jordi Prat i Coll, y la versión de concierto de Los juegos feroces (El día del Watusi, volumen 1) con la que Iván Morales nos muestra en Paral·lel 62 cómo empieza a adaptar a la escena la novela río de Francisco Casavella. En el mismo recinto, Raül Refree y la cantante italiana Maria Mazzota tocan al ritmo de la taranta en Evoé!, y Luisa Sobral une su voz y su música a las de Lucía Fumero y Rita Payés.
No son todas las propuestas del Grec 2023 Festival de Barcelona, que también ofrece cine (Sala Montjuïc y un ciclo en la Filmoteca dedicado a Rabih Mroué), muestras de circo contemporáneo europeo, creaciones teatrales de todo el Estado y media Europa y, como cada año, un montón de actividades paralelas que quieren implicar al público y convertirlo en un protagonista activo del festival.
Consulta el conjunto de la programación en la web del Grec Festival de Barcelona y empieza a comprar las entradas, a la venta a partir del 18 de abril.